P R Ó L O G O - ''Mi nombre es Mysterion''

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Eran las 23:30 pm y un niño rubio intentaba volver a su casa bajo la fuerte lluvia que caía sobre el pueblo de South Park. Aquel niño se llamaba Leopold Stotch, pero era más conocido por el alías de "Butters". El joven Stotch era un niño de delicados ojos celestes, una graciosa cabellera rubia y una piel suave como el algodón. Era dulce, amable, considerado, paciente, ingenuo e inocente. También era un buen amigo, compañero de clases y, por supuesto, un buen hijo.

Entonces... ¿Qué hacia esa pobre criatura caminando por las solitarias calles del pueblo de la montaña?

Todo esto había sido culpa de Eric Cartman. Él y sus estúpidos planes dejaron a Butters abandonado en plena horas de la noche, solo y bajo la lluvia que no parecía cesar. Cada vez hacia más frío y la lluvia era más fuerte. Butters soltó un quejido y se derrumbó en el suelo, arrastrándose al callejón más cercano. Se abrazó así mismo, empezando a sollozar entre sus piernas. No podía sentir sus músculos y estaba pálido como la nieve. Empezó a temblar, y a incrementar su pequeños quejidos. Quería estar en casa, con sus padres, en su cama calientita y con sus peluches. El callejón daba mucho miedo, era oscuro y olía fatal. Intentó levantarse pero estaba muy cansado para seguir, así que optó por recostarse contra la sucia pared del callejón y cerrar los ojos, deseando no morir de una hipotermia.

Tap, tap, tap

Una sombra se movía a través de los techos de los locales de trabajo. Se deslizaba por los postes de luz, y se camuflaba con la oscuridad. Un par de saltos más y aquella sombra ya había desaparecido entre los arbustos. Esa sombra tenía nombre... ¡Era Mysterion! El héroe enmascarado. Muchos decían que era un verdadero héroe, otros decían que tan solo era un niño jugando a ser alguien en la vida, otros... Ni sabían que era real. Lo único que resaltaba de él eran sus ojos verdes claros*, que siempre estaban alerta ante lo que podía pasar en South Park.

—Mmh... — Expresó al ver un callejón donde podía cubrirse de la lluvia sin ningún problema. Salió del arbusto, dando un salto y cayendo de puntillas en el suelo. Se incorporó y corrió hasta el dicho lugar.

"Ya es tarde... Debo volver a casa o sino mi hermana se preocupará y... ¡Mierda!"

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando su rostro pegó contra el suelo. Se levantó rápidamente, ignorando el moretón que empezaba a salir de su mejilla. Se rascó la cabeza, buscando el dicho objeto que provocó su caída. Pero al encontrar su objetivo... Notó que no era un objeto o un vagabundo muerto sino...

— ¡¿Butters?! — Exclamó, sorprendido Mysterion. El niño enmascarado frunció el ceño al ver que el rubio no respondía. Se agachó al lado del cuerpo inmóvil del Stotch, retirando sus mechones rubios de su rostro.

Tan tranquilo... Tan pacífico... Tan puro.

No podía dejarlo ahí. Además, después de todo... Butters era su amigo ¿no?

Lo cargó, haciendo que la cabeza del niño se apoyara sobre su hombro. Usó su capa para cubrirlo y empezó a caminar hasta la casa de los Stotch's. Un suspiro escapó de los labios del héroe. Algo le decía que todo esto era obra de Eric, por dios... ¿Cuándo sería el día en que Butters se daría cuenta que el gordo culón es un jodido hijo de puta y dejaría de jugar con él? Le daba mucha rabia, indignación y... ¿Celos? ¡Si, celos! ¡Porque Eric no lo dejaba jugar con Butters! Con razón Kyle no lo soporta.

La lluvia por fin paró, ahora solo quedaba la Luna y los charcos de agua. Mysterion retiró su antifaz, revelando que en realidad era Kenny McCormick. Sus ojos se elevaron hasta la ventana de la habitación del rubio y comenzó a escalar la pared, con cuidado de que Butts no se cayera y se partiera la cabeza en dos. Estaba agotado... Y posiblemente iba a morir de un resfriado pero iba a morir feliz sabiendo de que Butters despertaría a salvo en su casa, sin que ningún asqueroso vagabundo le robara o que alguna sidosa puta lo tocara. Porque, joder... Este niño desprendía inocencia y ternura. Era un blanco fácil para el mal por eso... ¡Por eso debía ser protegido! ¿Por quién? ¡Por Mysterion! O sea, Kenny... Pero disfrazado, ya sabéis. Una tonta y cansada sonrisa apareció en los labios del rubio al caer en esa grandiosa conclusión.

Por fin, sus manos se sujetaron del marco de la ventana, la cual abrió y entró tirándose directamente al suelo. Retiró la capa y depositó al pequeño rubio en su cama. Kenny se colocó nuevamente su antifaz y se dejó caer, otra vez, al suelo. Cerró sus ojos, buscando recuperarse para retirarse antes de que...

— ¿Uh? —

"¡MIERDA!"

Mysterion se levantó rápidamente pero al hacerlo sus ojos chocaron con los del rubio que lo miraba entre curioso y sorprendido. Ambos niños mantuvieron contacto visual por unos minutos hasta que el más pequeño le dedicó una pequeña y tierna sonrisa. El corazón de Kenny latía rápidamente, estaba nervioso y sentía perfectamente que unas gotas frías estaban cubriendo su frente. Leopold se acercó lentamente hasta él y lo atrapó con sus débiles brazos, transmitiéndole un cálido calor que ni él sabía de donde había salido.

— Gracias... ¿Cómo te llamas? — Susurró suavemente el ojos azules, sin despegar su rostro del pecho ajeno.

Kenny correspondió lentamente al abrazo, relajándose por completo. Hundió su nariz en la cabellera desordenada del otro chico y sonrió un poco.

— Mi nombre es Mysterion... —

Y esa noche, ninguno de los dos la pudo olvidar.

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* Baila como si no existiera un mañana * ¡Yeeeeeeesss! ¡Buenas noticias para todo el mundo; el Creek es canon! Y yo he logrado empezar este hermoso fic que, de verdad de verdad, quiero llevarlo hasta el final. Algunos de ustedes habrán leído "Me hace sentir feliz" ¿no? Bueno, esto es como una... ¿Continuación? No lo sé... Lo único que sé es que es bunny feels al tope ;w;

Espero que os agrade mucho esta nueva historia humilde y llena de mariqueras <3. Os veo en otra actualización ;___D.

- Abrazos y hamburguesas, CutieChaos.

*Ojos verdes claros: Kenny tiene ojos verdes claro como su mamá. Esto me lo he inventado, pero creo que Kenny sería perfecto con ojos verdes. Bueno Kenny es perfecto con cualquier color de ojos pero éste me gusta más (Headcanon personal número 15 (?)).






I can't be your hero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora