ETHAN P.O.V.S.
-¡Aquí nadie te quiere imbécil! -Grito uno de los tantos chicos.
-Déjenme en paz... por favor...-Suplique.
-¿Acaso crees -Me dio una patada en la espalda-. que los maricas deben de vivir aquí...?
-Yo...-Me volvió a patear -. Solo era un juego, entiendan lo. -Las lagrimas estaban apunto de salir.
Una, dos, tres, cinco, diez, quince, dieciocho, ya no no recuerdo la cantidad de patadas y golpes que recibí esa tarde, eran alrededor de diez u once chicos los que me estaban golpeando, cuantas veces me arrepiento de beber demasiado alcohol y tomar una decisión que me dañaría después... No puedo mas con eso, ir a la escuela, golpes, ir a hacer deportes, golpes, salir de casa, golpes.
-¡¿Que demonios te ha pasado Ethan?!
-Ya no puedo mas, ya no mamá. -Me abalance sobre ella, la abrace con todas mis fuerzas y comencé a llorar.
-¿A que te refieres Ethan?
-Vayámonos de aquí mamá, te lo ruego, esto esta acabándome...
-¡¿De que demonios estas hablando Ethan?!
-Mamá...-Le conté todo, absolutamente todo.
-¿En que carajos estabas pensando Ethan?
-No estaba pensando, estaba borracho...
-Creo... -Se tranquilizo -. Que para acabar con esto debemos irnos ¿Te parece?
-Mas que perfecto, quiero irme lejos...
