Parte 6 - Inolvidable infierno

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No consigo abrir la boca, no llego ni a parpadear, no puedo ni moverme, creo que me he quedado palida, hasta noto que me estoy desidratando, ahora mismo siento un gran vacio en el pecho, algo estraño, no me salen las lagrimas, ni las palabras, no me sale absolutamente nada, ahora mismo solo quiero desaparecer, no volver, irme de aquí ahora mismo.

-Cloe, ¿estas bien? -dice tocandome la cara con una mano y con la otra cojiendome la pierna derecha fuertemente - Cloe contesta porfavor, dime algo.

Al cabo de una media hora callada, sin moverme, totalmente en shock me muevo, y sin decir nada me levanto de la silla y salgo por la puerta disparada, rebusco en el bolso para alcanzar las llaves del coche, necessito irme, me subo al coche, pongo la llave, y se enciende el motor, cojo el volante y arranco, y veo por el retrovisor a Aaron que corre detrás del coche, cuando queda demadiado atras para alcanzarme no para de llamarme, y decido parar el telefono, quiero un momento a solas, ahora solo necesito estar sola, encontrarme.

Conduzco sin saber a dónde ir, y entonces recuerdo un lugar al que solía ir con Luke, muchas tardes de verano las pasé allí, cojiamos la bici y ivamos los dos hasta un lago que hay a unos kilometros de la ciudad.

Cuando llegó dejo el coche mal puesto y me bajo, contemplo el paisaje durante unos minutos, cierro los ojos y cojo aire, intento revivir en mis recuerdos aquellos días y entonces aparecemos en mi mente, como si fuera ayer, como si nunca nada huviera acabado, allí estoy yo, riendo, encima de él, un poco manchada de barro pero no se me ve preocupada por eso, él coje barro con las manos y me lo unta por las mejillas, me coje las manos y me empieza a hacer cosquillas...

De golpe abro los ojos, y una pequeña lagrima recórre ya mi mejilla.

Me empiezo a quitar la ropa, y me quedo totalmente desnuda, parece una tontería pero así me siento totalmente desnuda ante el mundo, con todos mis sentimientos, mis miedos, mis deseos, todo, absolutamente todo está al descubierto.

Me acerco y mis pies tocan el agua fria, y decido lanzarme, me sumerjo y cierro los ojos, empiezo a llorar y una vez empiezo no puedo parar, no puedo pornerle fin a mis llantos, y entonces me dejo ir, dejo de llorar, dejo de sentir, lo dejo todo atrás ya no siento dolor, ya no noto nada, y el dolor del pecho desaparece por completo, todos mis problemas ya no están, estoy totalmente cómo en un sueño, dormida, pero a la vez despierta, sin saber que es realidad, sin saber que pasa a mi alrededor.

Piensalo. Te he estado esperandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora