Me prometiste.

El reencuentro.

Diez años después,  abril del año 2012.
Ya tengo 18 años, me siento sola y vacía, nada me ha ido bien últimamente, parece que el único lugar donde puedo desahogarme es en Twitter.
-Simplemente ya no sé qué pensar al respecto. Enviar twitt.
Dejo mi celular en la mesa de la cocina y me dispongo a preparar algo de desayunar cuando de repente...
Alguien ha respondido tu twitt.
-Hola nenita, pásame tu pin.
Por un momento dudo,- ¿quién es Wally y por qué quiere mi pin?... ¡Diablos!  Es Wally, ya son muchos años sin saber de él... qué raro, pero que nervios.
-claro, 0988bbca1254 :D. Enviar twitt.

Segundos después oigo sonar de nuevo mi BlackBerry y es de alguien que me ha agregado.

-Hola Hylle ¿cómo has estado? ¿me recuerdas?
Puedo sentir una emoción y le respondo inmediatamente-¡¡¡HOLA!!!  Claro que te recuerdo, cómo crees que te iba a olvidar.-Hace dos minutos no tenía idea de quién era.
-Hola nenita, pude ver tu twitt y me preguntaba qué había sido de ti.

La plática se hace cada vez más intensa y larga, varios temas y entre ellos claro que estaba el de mi hermana, quería saber cómo había sido su relación y sinceramente quería saber porqué no había ido a su funeral.
-Wally, siempre me pregunté por qué no estuviste cuando Shey murió, esperaba verte ahí, pues ella te amaba y mi familia también, la hiciste muy feliz, cuando estaba contigo podía olvidar que estaba enferma.
-Yo no me enteré hasta dos semanas después, cuando me encontré a mi mamá llorando, no aguantó y me dijo que Shey había muerto, simplemente no supe qué hacer, yo pensé que se había enojado conmigo y por eso no contestaba y no me llamaba. Mis papas trataron de "protegerme" de ese dolor, así que decidieron ocultármelo.
-oh, no sabía, yo simplemente pensé encontrarte allá ese día, pero desde eso no supe más de ti.
-Sí, me retiré de todos lados, dejé de ir a la Iglesia, me alejé un poco de mis padres y traté de hacer mi vida aparte.

Realmente esa plática pudo explicarme muchas cosas del pasado, tantas dudas que tenía y cosas olvidadas por fin fueron contestadas.

-¿Cuántos años tienes Hylle?- Me pregunta luego de una charla de aproximadamente de dos horas.

-Tengo 18, recién los cumplí en octubre.

-¿De verdad? Estoy asombrado, aún recuerdo a esa niñita que corría por la sala con una cola de cada lado, eras tan chistosa.

Siento revuelto el estómago, cómo es posible que me recuerde de esa manera tan horrible, yo igual puedo recordar ser una piedra en el zapato, muy muy molestosa.

-¡Qué pena!- le contesto, puedo sentir como me ruborizo en tan solo pensar en él del otro lado de su celular riéndose de mí.

-¿Por qué pena? Si eras una niña muy linda y muy tierna, siempre serás mi cuñadita favorita. Quiero decirte que, hasta la fecha, solo he tenido dos novias más y les he contado de Shey, pues fue una hermosa pequeña historia la que pasamos, mi película favorita es la de A walk to remember porque me recuerda mucho a ella.

-Muchas gracias- logro escribir con los ojos llenos de lágrimas.

Aunque han pasado ya muchos años desde que mi hermana murió, puedo sentir que la extraño y necesito mucho aún, puedo recordar los juegos, las risas y las regañadas, me duele saber que ya no está y le agradezco a Dios que puso a Wally en mi camino para saber más de ella.

-Muchas gracias Wally, porque fuiste su primer y último amor.- logro terminar de escribir.

-Para mí fue un placer, ella era una niña como ninguna, con una sonrisa siempre en su rostro y así es como la recuerdo. No quiero que lo tomes a mal pero hablar de ella aún me pone mal, ¿Podemos seguir hablando de eso otro día?