A veces uno sufre, ya sea por causas externas o por sus propios actos; mas una verdad inherente es que todos lo hacemos alguna vez. La diferencia radicaba en, ¿Dejara cicatrices cuando acabe? ¿Podrán curarse o quedaran como un dolor pulsante para siempre? Para sorpresa de muchos, eso dependía de uno mismo, aunque bien podría ayudar otras personas.
Esta es la historia de dos chicos heridos que se ayudaron mutuamente, y que siempre significaría todo para el otro.
I'm tired of waking up in tears
Nico no recordaba la última vez que no se había lamentado en sueños, ¿sería la insistencia de su subconsciente en poner en mente aquella bella mujer italiana, su madre, una forma de torturarse por saber que nunca volvería a verla? ¿o lo sería el recordar a Bianca, la chica que le dejo solo y que fue la primera pieza para detonar su desgraciada vida?
Suspiro de forma cansina; respiraba el aire polvoriento y polucionado de Nueva York, aquellos alrededores que recorría como un alma en los campos de asfódelos, sin ninguna dirección a donde ir o a donde volver.
Por un segundo, una descabellada idea en su mente se formó; un campamento de verano con chicos de camisas naranjas, un par de chicos traviesos que trataban de convencerlo de jugar póker, un chico rubio de ojos azules de sonrisa amigable que le tentaba con su amistad, y lo que finalmente rompió la estampa, un chico de ojos verde mar que nunca vería más allá de lo que aparentaba.
Quitándose las ideas ridículas de la mente, siguió yendo por la ciudad como un ente errante.
No querría aceptar que quizás, el problema más grande que tenía, era el ser incapaz de soltar el dolor para progresar.
Cause I can't put to bed these phobias and fears
Memorias como las de sus doce años siempre acosaban su mente, ya no era solo el pasado que le fue arrebatado por Zeus y su descendencia; aquellas tales como un laberinto interminable del que creía que podría no salir, cadáveres de semidioses inocentes que tenían que luchar en nombre de sus padres, la idea de que sería asesinado por saber algo que ninguna otro sabía, y aun así podría decirse que esa fue una época "tranquila" en su vida.
Ahora estaba en el campamento mestizo, lugar al que creyó que nunca iría por no ser aceptado; y puede que quizás aún fuera cierto, no obstante debía intentarlo.
Los años habían hecho mella en él, ya no era un niño inocente o un mocoso amargado, tenía que reconocer las cosas por más dolorosas que fueran; y él sabía que no tenía miedo más grande, que el ser abandonado solo de nuevo, pero también se conocía lo suficiente para saber que si bien el amar solo lograba la posibilidad de quedarse solo otra vez, era lo que había querido desde la muerte de su hermana.
Mirando afuera para notar como el sol de media mañana iluminaba las cabañas cerca de la suya; se preguntó cuánto tardaría él en dejar que alguien se acercara.
I'm new to this grief I can't explain
Su conducta asocial no pasó desapercibida para nadie, así como su ropa oscura y actitud que daban tanto temor a los semidioses; que no se molestaban en acercase. A fin de cuentas, casi todos eran adolescentes y si hay algo que los adolescentes sabían hacer era juzgar sin conocer.
Al menos era bueno controlando sus nervios; el leve tono marchito de la hierba en sus pisadas pasaba desapercibido hasta para los hijos de Deméter. Quería un nuevo comienzo, una nueva posibilidad de hacer las cosas bien; pero cuando la gente no podía olvidar el hecho de que eras hijo del dios con la peor fama de toda la antigua Grecia las cosas se complicaban.
ESTÁS LEYENDO
Silhouette
FanfictionLas personas terminan heridas, se mientes tanto a otros como así mismos, lo que acarrea más sufrimiento que resultados. Esta es la historia de dos personas que al darse una oportunidad mutuamente, encontraron la felicidad. Solangelo. Slash.