MELANIE. ©

Cap. 4

-Suéltala
-¿Eh?
Un chico alto, de pelo moreno y ojos azules apareció frente a nosotros. Se veía autoritario, pero no era un profesor. Tenía el uniforme de alumno.
Se dirigió a nosotros. El tío que me agarraba salió corriendo.
-¿Que haces por los pasillos?
-Pues...soy nueva y estaba buscando los servicios.
Él rodó los ojos y me miró con una sonrisa.
-Soy Charles Hamilton, el delegado de cuarto, supervisor y presidente del consejo estudiantil...un placer- dijo y me dio la mano.
Le miré sin poder contenerme la risa. Él me miró extrañado.
-¿Charles?-dije entre carcajadas.
-Si...¿hay...algún problema?
Él estaba muy serio y comprendí que no se trataba de una broma.
-Perdona, es que en USA ese nombre no es muy común. Joder, ya casi olvido que estoy en Inglaterra.
-Ah...¿eres americana entonces? No me extraña-dijo mirando mi pelo - y ¿te llamas...?
-Melanie Harris. Melanie para los amigos. Un placer Charles, pero me tengo que ir a hacer mis necesidades.
Cuando caminaba hasta los baños y creía que se había ido dijo...
-¿Asi se lo pagas a alguien que te ha salvado la vida?
-Tu no me has salvado nada. Yo misma podría haberme librado de ese cabrón.
-Y...¿por qué no lo hiciste?
-Porque no me dio la gana. Y dejame ya o llegaré tarde a clases.
Luego de eso, la mañana transcurrió normal-dentro de lo que cabe- y al llegar a casa, me esperaba mi abuela.
Me fui a mi cuarto a hacer los deberes hasta que llegó mi padre por la noche.
-Mel, hija...- dijo cuando abrió la puerta.
-¿Si? ¿Que pasa papa?- dije algo asustada.
-Pues... Verás, me han ascendido en el trabajo.
-¡Bien! ¡Eso es estupendo! ¿a que viene esa cara tan larga?
-Que eso significa que tendrás que alojarte temporalmemente en el instituto.
-¿¡Que!? ¿¡Por qué!?
-Ahora tu abuelo y yo tenemos que trabajar hasta muy tarde y tu abuela no puede hacerse cargo de ti.
-Pero ¡no puede ser!
-Solo será temporalmente. Mañana hablaremos inmediatamente con el director para que te busque una habitación.
-Esta bien...
Mierda. Yo no quiero hacer amigos. ¿y si me tocaba con una compañera de piso estirada y pedante? Ah espera, así son todas.
Tantas cosas malas pasaban y todas tan deprisa que el día siguiente me compensó bastante...