La fiesta

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Siento los parpados pesados, la cara helada y algunos cabellos dentro de mi boca. Creo que estoy despertando. Aún estoy somnolienta, pero logro sentarme al borde de mi cama para ver la hora. Me encuentro a tiempo para levantarme, ducharme, tomar desayuno y hacer mi habitación; todo en ese orden.

Me quito la ropa para entrar a la ducha, abro la llave para esperar que el agua se caliente, me cepillo mí enredado cabello y en menos de dos minutos entro a la ducha. El agua esta caliente, perfecta para el clima de hoy, helado.

Al vestirme, se me eriza la piel por el frió, tomo rápidamente mi camiseta, mis jeans, y un suéter grueso de lana con diseños étnicos. Al verme vestida no me convence mucho, pero estoy algo atrasada y debo secarme el pelo o mi madre no me dejara salir así.

Separo mi rizado cabello en capas para sacarlo mas rápido y mas fácilmente, después de 20 minutos estoy lista, vestida y seca.

-Mama- grito hacia el primer piso -¿Que hay de desayuno?

-Solo tostadas- responde mi madre -aunque ya están frías porque te haz demorado mucho.

No me apetece mucho comer tostadas frías, pero al escuchar como cruje mi estomago, me veo sin opción.

Cuando bajo, mi madre me mira con una sonrisa diciendo: no se repetirá. Me estaba esperando con las tostadas calientes y un café para el camino.

-Apresúrate, no quiero que llegues tarde, hoy tienes examen de idiomas, y después de clases te acompañare a arrendar un disfraz

- Gracias mamá, ¿me pasaras a buscar al colegio? , verdad

-Si si, ahora vete que te vas a atrasar mas- Dice ella dándome un leve empujón en la espalda para que salga de la casa.

El café esta tal como me gusta, y las tostadas tienen queso fundido, todo esta delicioso, pero no me quita el hambre. Veo la hora, son las 7:45, estoy justa de tiempo, no podre comprarme comida en el camino.

No me gusta ir a pie al colegio, queda bastante cerca de casa, pero en esta fecha hace un frió de los mil demonios, tengo la nariz tan roja y helada que no la siento.

-¡Eli!- escucho una voz conocida en el fondo.

Miro hacia atrás y veo a Emma corriendo hacia mí

-¡Espera!- grita nuevamente. Esta vez, las personas de los alrededores se voltean hacia nosotras; un chico de pelo castaño y piel trigueña, una chica de pelo rubio y labios muy delgados, una chica negra de mi clase de física y un amigo de Emma, Emilio Liu.

Cuando me alcanza lo primero que hace es abrazarme.

-Hola, Emma- la saludo sin despegarme de su abrazo

-Eli, hola, estas heladisima, ¿Como sales tan desabrigada de tu casa?- me extiende su brazo con una bufanda y un gorro de lana- ponte esto.

-Gracias, de verdad lo necesitaba. Por cierto... ¡Feliz cumpleaños!- la abrazo nuevamente.

Cuando llegamos a la puerta del salón de clases, ambas sabíamos que veníamos tarde, todo estaba en silencio, se notaba que el señor Ryder había llegado mas temprano de lo usual; el es muy simpático y gracioso, pero por alguna razón, con el no me llevo. Emma golpea la puerta, y yo la abro levemente y asomo mi cabeza, no podía ser, estaban esperando a Emma, con una bienvenida de cumpleaños, yo no tenia ningún sentimiento mas que el de culpa, ¿como ellos le hacían una sorpresa y yo no?, yo que soy su mejor amiga....

El señor Ryder me hace una seña, yo tomo a mi amiga del brazo y la muevo hacia el salón.

-¡SORPRESA!- gritaron todos, mientras corrían a abrazarla. Manos y empujones volaban por todos lados mientras yo era expulsada por el montón hacia un costado.

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⏰ Última actualización: Dec 01, 2015 ⏰

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