Incomprensible Necesidad

Capitulo 1: Primera impresión

Annie

Remarqué mi delineador mirándome en la cámara delantera de mi celular, comencé a pasarme él rímel cuando el auto dio un salto y me lo clavé en medio de la frente, comencé a refregar intentado sacarlo pero se puso peor, comencé a rebuscar entre mis cosas una toalla que pueda removerlo pero no la encontré. Le dí unos toques en el brazo a mi mejor amiga, Nora, que también se estaba arreglando.

- ¿Que pasa?- preguntó aún sumergida en su espejo. Levantó la cabeza y puso una cara de horror - ¿que rayos te pasó?- exclamó.

- Él rímel. ¿Está tan mal?

- Chicas, en 5 minutos llegamos a Walker - Dijo Nathalie, mi madre, mientras tomaba la mano del conductor, Jimmie, mi padre.

Tendría que entrar así , a mi nueva casa, mi nueva escuela, mi nuevo internado.

····

Habiamos llegado. Retiramos las cosas del baúl y nos adentramos en el edificio. Pagamos en la recepción y elegimos nuestra habitación en el segundo piso, la 57, mientras nos daban una llave de la misma a cada una. Era una de las pocas que estaban libres aunque la escuela era tan grande que tenía alrededor de mil.

De camino, nos cruzamos con el novio de Nora, Marco.Él era muy apuesto, aunque sus ojos marrón oscuro, su cabello castaño y su metro 70 no fueran nada fuera de lo normal, pero tenía su atractivo. Era todo lo contrario a Nora, una chica rubia con unos ojos verdes envidiables y su metro 50. Pero hacian la pareja perfecta ¿Dicen que los opuestos se atraen no? Nora era diferente a mi en cuanto aspecto, yo era mas bien castaña y mis ojos eran de un color miel, mi altura era similar a la de ella pero yo era unos centímetros mas alta.Sin embargo, en lo que se refiere a personalidad eramos muy parecidas, ambas eramos muy observadoras y sobre todo muy celosas. Al reparar en el amigo de Marco, en el cual no había prestado atención aún, descubrí que era más alto que Marco, también muy apuesto con unos ojos verdes y cabello morocho. Parecía ser buen chico.

-Hola, Linda frente - dijo con tono sarcástico. Retiré lo de buen chico.

- Linda cara - dije empleando él mismo tono, y siendo tan desagradable como él.

- Gracias - me guiñó un ojo.

Marco se acercó con Nora a caballito. No había reparado en que había corrido a él, igualmente era de esperar porque no podian estar mas de un día separados, razón por la cual asistimos a este internado tan lejos de mi hogar.

-Ethan, ella es Annie, la mejor amiga de mi chica. Annie, mi mejor amigo. - nos presentó.

- Un gusto conocerte -dijo Ethan extendiendo una mano para que la estrechara.

- No puedo decir lo mismo -dije pasando por su lado siguiendo mi camino hacia mi dormitorio.

- Annie!!- gritó Nora corriendo para alcanzarme.

·····

La puerta número 57 estaba casi al final del pasillo a la derecha del segundo piso, en el edificio de chicas. Era bastante espaciosa por lo que creo era de 6 metros de largo y 4 de ancho y ademas tenia un baño con ducha. Habia dos camas, una contra cada pared con alcoholchados blancos y dos almohadones negros, tambien habia dos estantes vacios en la cabecera de cada cama y un escritorio chico para cada una de color blanco con una lámpara rosa y una computadora. Las paredes blancas estaban vacias para que pudieramos decorarlas a nuestro gusto, exceptuando por una ventana que daba a otra del edificio de chicos y por un ropero a cada lado de la ventana.

-¿Linda no?- dije mirando a Nora.

-Si, me encanta.

Empezamos a desempacar nuestras cosas y a acomodar el cuarto en el que ibamos a vivir el resto del año. Lo primero que saque y colgué en perchas dentro del ropero fueron mis prendas preferidas: mis vestidos. Tenia de todos colores, desde blanco hasta negro, luego continue con el resto de mi ropa guardandola en los cajones y mas tarde con mis zapatos y zapatillas, colocandolos en el piso del ropero. Después de haber terminado con nuestras prendas de vestir nos dedicamos a decorar nuestro cuarto, lo primero que hicimos fue acercar nuestras camas haciendo que queden separadas por solo 2 metros de distancia en el medio de la habitación y correr los roperos a donde éstas estaban antes. Despues empezamos a desenrollar un poster de nuestra serie favorita: Pretty Little Liars y lo colgamos en una de las paredes colocando una chinche en cada esquina. Lo siguiente fue desempacar nuestros libros y colocarlos en los estantes correspondientes, tambien algunas cajitas con accesorios y por último una foto nuestra de hace unos años y una actual.

Una vez terminada nuestra tarea de desempacar nos recostamos en nuestras camas satisfechas por como había quedado hasta que se escuchan tres golpes en la puerta. Yo no me levante asi que despues de unos segundos lo hizo Nora y salió disparada por la puerta abalanzandose sobre Marco. Pega un pequeño salto y coloca sus piernas alrededor de sus caderas comenzado a besarlo. Me levanté y cerré la puerta para evitar verlos pero treinta segundos mas tarde se vuelven a escuchar golpes en la puerta obligandome a volver a abrirla. No había nadie e iba a cerrar la puerta cuando miré hacia abajo y vi un sobre, me agaché para tomarlo y entré cerrando la puerta detrás de mi.

Abrí el sobre, dentro había una nota que decía: empezamos con el pie izquierdo, ¿intentamos de nuevo? Por favor abre la puerta e imagina que nuestro primer encuentro nunca ocurrió. E.

¿E? Qué se suponia que significaba E?

Se escuchan 3 nuevos golpes en la puerta, la abro y veo a Ethan.

-¿Que querés?- le dije de mal modo.

-Menos mal que me tomé la molestia de escribirte esa nota

-¿Era tuya? No sabia a quien pertenecia la E.

-Muy bien todo aclarado, empecemos de nuevo. Hola soy Ethan, el mejor amigo de Marco- dijo extendiendo la mano para que yo la tome, pero no lo hago y me cruzo de brazos.

- No es que no sea simpática, es que con los chicos como tu no suelo llevarme bien .

-¿Se puede saber como soy?

- La clase de persona que le dice a una chica que no conoce que tiene la frente manchada de rímel. Cosa que ya sabía gracias.

-Escribí esa nota para poder solucionar nuestra forma de concernos, pero veo que no tenes intenciones de hacerlo.

- No, ahora, si no te molesta, salí de mi habitación.- se quedó parado mirandome- ¿Que estas esperando?

- Dijiste: "si no te molesta" y me molesta así que me quedo hasta que me des una buena razón para irme.- dijo sentándose sobre mi cama.

- Si no te vas vos me voy yo.- siguió sentado, así que abrí la puerta y me largué. Esperé unos minutos a que salga, y como no lo hizo, volví a entrar.

-¿Quien era Scott?- me quedé boquiabierta, estaba revisando mi diario.Él, un chico que conocí hace dos horas y que no tenía intención de conocerlo durante más tiempo, estaba leyendo mi diario, un cuaderno con rosa donde escribia absolutamente todo lo que pensaba y que nunca me había atrevido a mostrar a alguien. Me quedé quieta durante una milésima de segundo hasta que reaccioné y me abalancé sobre él intentando sacarle el objeto que contenía mas cantidad de secretos que mi cabeza misma, pero fue imposible. Se asomaban lágrimas en mis ojos, no quería que ese idiota desconocido me vea llorar por Scott. 

- Damelo- intente contener las lágrimas sin mucho éxito, pero a él no pareció importarle.

- Hoy a la noche, te veo en él Shang gai, espero que te guste la comida china.- dice saliendo de mi habitación, aún con mi diario en su mano.

*TOTALMENTE RENOVADO. ESTOY REESCRIBIENDO LA HISTORIA PORQUE LA HABÍA DEJADO MUY ABANDONADA. ESPERO QUE LES GUSTE!!*