Ferguson, la torta.
Ferguson, nunca entendí por qué les desesperabas.
Pedías dinero y nunca lo devolvías.
Rompiste la guitarra de Evan.
Mojaste los cigarros de Iker.
Perdiste el ajedrez de Florencia.
Pero eras un gran chico.
A pesar de que nos desesperaba escucharte decir pastel en italiano.
