Una Trampa de las Moiras

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La tierra tembló ligeramente, haciendo tambalear las cosas en su cabaña y por consiguiente a el mismo. Se pregunto si alguien había conseguido sacar de sus cabales al chico del mar. Percy como instructor no tenía la mejor paciencia del mundo.

Entonces su puerta se abrió de un golpe sordo.

-Nico!-exclamo Jasón, venia claramente exaltado y su respiración entrecortada dejaba claro que había llegado hasta allí corriendo.

-aaargh, cierra esa maldita puerta Grace-gruño Nico cubriendo sus ojos con una mano.

Jasón frunció el entrecejo, observo la oscura iluminación de la cabaña de su amigo, unas cuantas velas encendidas en una mesita y unas lucecillas pegadas a la pared de tonalidad verde daban al lugar un aspecto tenebroso. Jasón hizo chasquear su lengua con disgusto.

-¿sabes? No tienes que llevar este rollo del inframundo tan profundamente-dijo al tiempo que cerraba la puerta y se acercaba a Nico.

El hijo de Hades se encogió de hombros-me gusta esto.

Nico se hizo a un lado en su sofá de cuero negro, dejando espacio para que el hijo de Júpiter se sentara a su lado.

Jasón se dejo caer a su lado y abrió el portátil que Nico no se había fijado, llevaba bajo el brazo.

-¿qué es tan importante? ¿De dónde sacaste eso por cierto?-pregunto Nico señalando al aparato. Tener objetos tecnológicos podía resultar peligroso, lo que era una lastima porque en realidad eran muy guay.

-me lo dejo Annabeth por supuesto. Valoro mi vida ¿sabes? Ahora cállate y deja que me concentre-dijo colocándose las gafas y encendiendo el aparato.

El hijo de Hades suspiro y se reacomodo, más cerca de Jasón, pero dejando suficiente espacio entre ellos para que no resultara incomodo. Ciertamente ellos tenían una amistad extraña, Jasón se había proclamado su mejor amigo poco después de volver de Grecia y había decidido que su misión en la vida era mantener un ojo sobre Nico. El asunto resultaba agotador, pero Nico estaría mintiendo si dijera que le molestaba por completo.

-aquí esta!-exclamo Jasón, triunfalo y su mandíbula se descolgó involuntariamente.

-q-que es eso Jasón?-pregunto con la voz ligeramente temblorosa

El hijo de Júpiter soltó una risita-Un fanfic!

Nico le dirigió una mirada asesina.

-al parecer a la gente le gusta escribir cosas sobre ti y sobre Percy.

-ya veo... -musito Nico aun sonrojado.

-aaah! Pero no es todo-Jasón cerro las pestañas abiertas en la pantalla y abrió otras-también hacen fanarts!

Le enseño a Nico una cierta cantidad de dibujos, dibujos más bien obscenos.

-Jasón... esos-Nico trago- ¿ese es Percy?

-y ese eres tú!-exclamo el chico rubio alegremente.

Nico se levanto de manera brusca, alejándose del portátil y las imágenes en su pantalla.

Jasón comenzó a leer:

"Percy le sujetaba con fuerza, rodeando su cintura con un brazo y acariciando su mejilla con la otra mano.

-estás seguro Nico?-pregunto el chico del mar

-estoy seguro de que te amo. Quiero hacerlo-aseguro el menor.

-seré cuidadoso-prometio Percy, dirigiendo ambas manos al trasero de Nico y atacando su boca en un beso salvaje..."

-detente!-rugió el verdadero Nico, aventándole a su amigo una almohada que había tomado de su cama-deja de hablar de mi... de mi trasero!

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