No sabia de quien eran las cartas, nunca lo supe, no hasta que me dijo quien era, pero lo dijo en él peor momento para los dos, cuando se tuvo que ir. Nos lastimo en cierto modo a los dos debido a que yo extrañaba sus notas, y supongo que él, escribirlas. Se me hacia algo raro él hecho de registrar mi casillero y no encontrar nada mas que libros e idioteces mías. Era algo horrible, porque ya me había acostumbrado y él me revivía con cada nota, y ahora, muero cada día un poco mas.
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Alto prólogo ahre, la cague
Bueno
Eso es todo y baibai
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Vivir Muriendo
Random-¿Alguna vez te dije que adoro tus ojos? -Nunca te voy a entender. -¿Por que lo dices? -Mis ojos son marrones, algo demasiado común. -Lo importante no es él color de los ojos, sino, lo que pueden llegar a ocultar.