Tan Sólo Tú

"Stafford"

¿nunca han sentido que no encajan en el mundo?

¿que son diferentes a los demás?

Bueno pues así me siento yo, hace una hora el avión aterrizó en el aeropuerto.

Tome un taxi, y aquí estoy.
Stafford. La gran y gloriosa escuela, que cubre nuestro secreto, donde el objetivo es convivir plácidamente con los humanos.

Le digo al chofer del taxi, que este es lugar.

El señor de aparentamente unos 40 años de edad, se asusta un poco.

- ¿esta segura que es aquí señorita? Dice el en un tono nervioso.

- si, aquí es ¿cuanto va a ser? Digo mientras saco mi billetera.

- 17 dolares estadounidenses. Dice el.

- aquí tiene, muchas gracias por traerme.

- ¿va a necesitar ayuda con sus maletas?

- no, gracias yo puedo sola.
Digo seria.

Me bajo del auto, con mis 2 maletas.

Veo que hay una pequeña prefectura en la entrada. Primero tengo que registrarme según las ordenes de mi abuelo.

Me acerco, y esta una señora, por su aspecto se nota que no le agrada nada.

- buenos día.....
Me interrumpe.

- ¿nombre?

- Emma Thompson.

- ¿edad?

- 17.

- muy bien, su habitación es la 614, siga las reglas, nada de problemas, establezca sus cosas en su habitación y cierre con llave en la noche. El día de mañana (domingo) podrá recorrer los alrededores, eso es todo.

- muchas gracias.

Camino guiando me por un pequeño croquis que me dio la prefecta.

El instituto es muy grande, y hablo en cerio, bueno me ubico en los pasillos, buscando mi habitación.

Haber 612, 613 y 614 bingo!

abro la puerta, y parece que no les gusta limpiar aquí.

El lugar esta muy sucio, lleno de polvo. Supongo que tendré que limpiarlo.

Dejo mis maletas dentro de la habitación, y cierro con llave.

Camino, buscando una conserjería o un cuarto de limpieza.

Pero no, no encuentro nada.

Doy vuelta en un pasillo y no hay nada. Solo muchos adolescentes con las hormonas alocadas.

¿que por que lo digo? Bueno pues se están comiendo prácticamente en público, si quieren hacer algo que se vayan a una habitación, o a un hotel.

Pero que tonta soy, si son los sangre pura, hijos de jefes.

Y por lógica los mas creídos.
Me dedique a caminar entre ellos sin tomarles importancia, pero ellos me comían con la mirada, lo sentía.

Miro el suelo y me doy prisa al caminar.

- ¿pero que tenemos aquí? Alguien me sujeta del brazo.

- dagh. Que asco es una mestiza. Grita un chico.

- O, ya veo con razón apesta. Dice el tipo que me sujeta.
Todos se ríen.

- Sabes que somos tus superiores, ¿no? Tienes que obedecernos. Dijo el mismo.

- ¿Pero que pasa aquí? Dice un conserje.

Gracias dios! Me sentí aliviada.

- no pasa nada, dijo el sujeto que me sostenía.
Solo nos divertíamos un poco.

- Regresen a su habitación, ya es tarde, dentro de una hora sera la cena. Hasta entonces no salgan. Dijo con autoridad.

Yo solo camine detrás del conserje, no me iba a quedar ahí.

- ¡hasta luego mestiza! Escuche que gritaron mientras se reían.

No le tome importancia. Y seguí caminando.

- ¿que hacías ahí hija? Me preguntó el conserje.

- bueno, estaba buscando la consejería. Le Sonreí.

- puede ser peligroso caminar por esos pasillos, esos adolescentes se creen todo poderosos. Dijo el señor.
Por cierto me puedes decir Peter.

- muchas gracias Peter, por ayudarme.

- no hay de que, y ¿que necesitas de la conserjería?

- algunos utensilios de limpieza, mi habitación esta muy sucia.

- bueno aquí tienes. me paso una escoba, trapeador y un balde.

- te ayudare. Los 2 subimos y me ayudo a límpiar.

Cuando por fin acabamos, Peter se fue y yo me quede sola.

Se escucho un timbre que anuncia la cena.

No tenia hambre así que me quede en mi cuarto.