Te adoro cuando sonríes y me besas, cuando te ríes y eres feliz. Te adoro mucho mas cuando estas triste y molesta, o sin ganas ni motivos para reír.
Te quiero cuando me soportas, cuando ni yo mismo lo hago, te quiero aun mas cuando no lo haces y me corres.
Te adoro cuando peleas con tu mama y me dices que no la soportas, te amo cuando la amas y me dices que sin ella no podrías vivir.
Te adoro sobria y lucida, con audífonos e ignorándome, cantando así afinaito esas canciones de PARAMORE que amas. te adoro aun mas borracha y loca, desafinando, maullando y gritando esos vallenatos que odias por Altavoz.
Te adoro así flaquita, comelona, glotona y dulcera. Y cuanto amo ese rollito que te sale en la barriga y esas dietas ficticias que diseñas para incumplir.
Te adoro de fiesta, bien bonita y apretáita, arregladita y muy sexy. También me encantan ver los tacones en tus manos, el pelo enmarañado y el maquillaje corrido y tus fastidiosas ganas de hacer pipí.
Adoro a tu amiga, esa que no me cae para nada, la sonsacadora, alcahuetá y metíche, me matan esas fotos tontas y locas que se toman. La adoro ahorita mucho mas que cuando nos presento.
Te adoro también metida en tus libros y novelas, de ángeles y vampiros que se enamoran de niñas humanas, no te celo de Edward, tampoco de Pacht pero harías mejor pareja con Jacob.
Adoro ese pie de parchita que preparas, Dios mio cuanto lo amo! tan perfecto y sublime es subir al cielo y también ese pollo, crudo por dentro, quemado por fuera y sin sal. Al que le sumas tu carita malévola de "te lo comes, no me interesa".
Te adoro desnuda en mi cama o en un hotel, mordiéndote el labio, gimiendo, besándome y amándome. Te amo en tu casa con esas fachas, con las cholitas que odias o las pantuflas de winnie pooh, peleándome y odiándome.
Adoro tus pechitos que son pequeños como duraznos, dulces y tímidos los martes o los miércoles, y salvajes y atrevidos con pushup los viernes o sábados.
Amo tomar el café de tus pezones en las noches aunque se que luego no podré dormir, y amo tomar el cafecito de tus ojos en la mañana que ya me es necesario para vivir.
Te adoro distraída y torpe.
Centrada y organizada.
Celosa y confiada.
Perfectamente Imperfecta.
Te adoro en pijamas y sin maquillaje, despeinada y de mal humor.
