Octubre, 2013.
Me dijo que pasase el fin de semana en su casa, su madre decía que la notaba más feliz desde que hablaba conmigo.
Estaba llegando cuando cambió de idea, "¿cómo puede decirte eso cuando estoy llegando?", en fin.
Me armé de valor y le pedí que saliera conmigo. Dios, me temblaban las piernas. Dijo que si, claro, mientras me miraba como diciendo menos mal que lo has dicho tú, yo no lo iba a hacer.
Mintió para que pudiese dormir con ella y nos quedamos solas en su casa.
Solo tuvimos una noche y medio día de felicidad.
Cogí el último autobús, su madre me había echado "a ti no te gustan las chicas, ella te está confundiendo, ¿a qué hora se va? En cuanto coja el bus voy a por ti, no te muevas." y me fui un día antes te lo previsto.
Después no supe de ti, me escribiste diciendo que me querías y, después de eso, vacío.
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Vacío
Short Story"Empezamos de cero por segunda tercera e incluso cuarta vez, y por cada comienzo ese cero estaba más lleno; tenía más recuerdos, más rencor. Al final la única opción fue darlo por perdido, nuestro cero se volvió negativo. "