El Hombre Caballo

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Me desperté, cogí mi móvil para saber la hora, 5 de julio a las tres de la mañana. Hoy me voy de campamentos con Sonya, mi mejor amiga. Sobre todo somos amigas porque mi padre y su madre fallecieron en el trabajo eran compañeros. El campamento al que vamos a ir esta a las afueras de la ciudad. Es el primer año que vamos, ya que nuestros padres no nos dejaron ir el año pasado porque decían que eramos muy pequeñas.
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Ya por la mañana yo y Sonya salimos de mi casa.

- Chicas os digo de verdad que debería acompañados y llevaros en coche.- dice mi madre, estos días a estado rara como si no quisiera que fuéramos al campamento.

- Mama de verdad que no hace falta. Creó que coger un autobús e ir a la otra punta de la ciudad no es tan peligroso.

- Si que lo es.

- Nicole, no te pongas nerviosa se sabrán cuidar solas.- dice Jackson el padre de Sonya.

- Ves mama deberías de tranquilizarte.

- No nos va a pasar nada señora adams.- dice Sonya - somos chicas fuertes- le lanzó una mirada de asco- que sosa eres Ariadna.

- Bueno nos podemos ir, por favor.

Bajamos en el ascensor con muestras maletas mientras espero miro a Sonya, se la ve muy cambiada desde el final de curso. Antes tenia el pelo castaño y los ojos marrones claro, pero ahora se a teñido el pelo de negro con unas mechas rojas en las puntas, no digo que le quede mal pero la veo rara y por una extraña razón los ojos le han cambiado de color al negro. Yo en cambio sigo casi igual, mi pelo es igual de raro, la parte de la raiz muy negra y el resto de color rubio, muy rubio. Mis ojos seguían siendo de color azul, lo único que había cambiado en mi era la forma en la que me sentía, parecía otra persona, ahora creía que todos me observaban y murmuraban. Hasta cuando estaba solo me sentía unos ojos detrás de mi nuca, pero cuando me giraba no había nadie.
El ruido de las puertas me habido de que el ascensor había llegado a la planta calle y también me sirvió para despertarme y sacarme de mi ensoñación.

- No te parece un poco raro la forma en la que tu madre ha insistido, siempre suele ser muy calmada.- dijo mi amiga, la verdad es que, si estaba muy irritable y nerviosa, todo lo contrario en ella, que siempre andaba tranquila.

- Si estos días la e notado un poco rara.

- Bueno estará nerviosa.

- Lo mas probable es que sea eso.

Nos quedamos un rato en silencio mientras andamos y pienso en mis cosas. Saco una pulsera del bolsillo, me la trajo mi madre de África, fue el verano pasado como cirujana, ya que ella trabaja en ese oficio. Me trajo la pulsera que simbolizaba a los dioses. En plan dioses antiguos la pulsera me gusto mucho, tenia mis dos colores favoritos, el amarillo y el negro, como el escudo de hufflepuff, fue lo ultimo que pensé antes de que Sonya gritara.

- Me parece que si no corremos perderemos el autobús.

Mire hacia el frente y si estaba en lo cierto el autobús estaba apunto de arrancar.

- Sera mejor que corramos a no ser que queramos volver a casa.

Y nos pusimos a correr.
Llegue justo a tiempo, antes de que cerraran los puertas.

- Perdone puede esperar es que tenemos que entrar.

Fuimos a nuestros asientos, que eran de tres, en el lado de la ventanilla había una chica que parecía estar dormida. Así que la dejamos y nos pusimos a hablar sobre nuestras cosas.

- No se que esperar de el campamento creó que sera divertido.

- Si supongo

- Una pregunta Ari tu crees que la magia existe.

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⏰ Última actualización: Dec 09, 2015 ⏰

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