Guillermo se encontraba con Alex, caminando por las calles de Madrid, ambos tenían la vista en el suelo, ninguno de los dos tenía ganas de hablar, el dolor que sentían era demasiado, perder a tus seres queridos nunca es fácil, y peor si estás en un mal momento en el cuál lo único que quieres es estar con ellos, abrazarlos y que te digan que todo está bien.--Willy--llamó el más bajo--, ¿Qué vamos a hacer?--Metió sus manos dentro de los bolsillos, suspirando al hacer aquello.
--No lo sé.--Lo que acababa de pasar aún no lo asimilaban del todo, no podían creer aquellas palabras, sus padres han fallecido en un choque, lo lamento tanto.
Ellos nunca creerían que entrarían a un negocio cómo ése, pero, las oportunidades que te dan son para aprovecharlas, ¿Cierto? ya no tendrían miedo ni hambre.
--Pst.--El llamado de un arbusto los distrajo, ambos se miraron y dudosos avanzaron al lugar del ruido.
--¿Quién es?--Cuestionó Willy, con algo de desconfianza.
--Chicos, esto será rápido, yo soy Carlos Audaz, narcotraficante de primera--Los amigos se miraron con miedo--. Quiero darles empleo, no es nada del otro mundo, verán que una vez dentro la vida se les hará mas fácil de lo que creen.--El extraño detuvo su vista en Willy y le sonrió, este apartó la vista e hizo contacto visual con su amigo.
--Yo no sé, ¿Traficar droga?
--Exacto, porque no creo que personas tan guapas--Al decir esto su vista seguía en el chico de ojos rasgados-- quieran depender de alguien, ¿O si?--prosiguió.
--Vale, veremos cómo nos va.--Aceptó el joven Díaz, el mayor de los tres sonrió y les dio una tarjeta, la cuál contenía su número del móvil y una dirección.
--Ahí nos vemos mañana a penas el sol baje.--Y desapareció.
--¡Tú estás loco!--Gritó el más blanco--¡¿Narcotraficantes?! ¡Por Dios, Willy!
--Ya, no te exaltes capullo, no creo que sea tan difícil.
--Ya te quiero ver tras las rejas, joder, que es algo serio.--Se cruzó de brazos con el ceño fruncido.
--Nada de eso, vamos a estar bien, confía en mi.
Y así empezó su aventura, quien diría que de un momento a otro los dos se volvieron los mejores en su categoría, avanzando cada vez más, aquellos chicos dudosos, indefensos y llenos de inseguridades ya no existían, ahora eran seguros y valientes, pobre de aquel qué intentara hacerles algo, no despertaba al día siguiente, tenían varias formas de poder vender al publico, no sólo dándoles pruebas, ellos tenían el don de seducir, ya sea hombre o mujer, caían en sus redes, Guillermo Días y Alex Bravo, los más buscados, más deseados y mejores narcotraficantes.
--¡Joder!--Se quejó Guillermo--, media hora esperándote, Alex, debes apurarte más.
--Vale, sabes que siempre me demoro, soy meticuloso.--Ambos salieron, una entrega más del día, en unas semanas debería prepararse para la fiesta que iba a haber, ésa era su oportunidad de vender, no podían desaprovecharla.
(...)
--¡Woho!--Gritó de alegría Alex--¡Los perdimos, caraculo!
--Ya, eso estuvo cerca.--Ambos se recostaron en la pared, Guillermo sacó un cigarrillo de su chaqueta y se puso a fumar.
--Deja ese vicio, es malo.
--Vete a follar, tío, es mi vida.--El trabajo los había cambiado demasiado a decir verdad, pero no podían salir, ni querían, ganaban una buena suma de dinero, ahora solo tenían que seguir así hasta que se acabe su existencia o los atrapen, la primera era más probable que pase, miraron al cielo, aún extrañaban a sus padres, pero ellos estaban ahí por ellos, estúpido ¿No?, pero para ellos era más creíble, trabajaban por sus padres, por ellos, para que estén orgullosos de los niños que algún día fueron.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
¡Hola! @Rusherthekiller presente, aquí el primer capítulo, espero les guste :D
ESTÁS LEYENDO
Narcotraficantes ; Wigetta ; Staxxby ;
FanfictionGuillermo Díaz y Alex Bravo, dos personas que por simple juego del destino terminaron como narcotraficantes. Samuel De Luque y Frank Garnes, dos policías encargados de encontrar a los criminales de la ciudad de Madrid, los dos trabajando como un equ...