Salimos del aeropuerto, estábamos sobre la madrugada, aún no había salido el sol de cada día.
-No hay moros en la costa podemos irnos tranquilos. ¿Pedimos un taxi?-. Dijo Falcón justo cuando apareció él por la puerta.
Cuando cruzabamos la calle, para ir a un sitio que no me han dicho pero presentia donde era, aparecieron en nuestro alrededor muchos hombres. Todos eran altos morenos jóvenes.
- Son los que antes dije que no sabia que eran porque no eran ni drow, ni Elfos y menos humanos-.Dijo Escarlata con sus rojos ojos mientras los miraba fijamente atravesando su calor corporal de todos ellos.
-La queremos a ella-. Dijo uno de ellos.
-Sobre nuestro cadáver-. Dijo Marcus antes de convertirse en esa bestia enorme que vi ayer en la carretera cuando luchaban contra los drows.
Entonces todos los chicos que nos rodeaban y me observaban, sin quitar la vista, se transformaron en unos seres fantásticos maravillosos y tenebrosos, pero alucinantes y poco creíbles. Eran lobos, es decir, hombres lobos. Mi hermano se convirtió en una especie de hombre con una mezcla de planta, arena y carretera con el fin de defenderme. Fue algo alucinante. Escarlata como siembre una llama ecendida escupiendo fuego. Y como no Falcón el hombre invisible del grupo. Y yo ahí escondida como siempre y protegida por ellos. Pero derrepente me cogen por detrás y me raptan sin que mis compañeros se den cuenta de lo me estaba ocurriendo. Me pusieron como una especie de líquido con el cual me dormí sin darme cuenta y todo se me nubló en un segundo.
Me encontraba en un sueño profundo en el porton donde vi a las driadas anteriormente, en el fondo de la carretera se encontraba la mujer que estaba en el cuadro de aquella biblioteca - salón, parecía que me quería decir algo.
Pero derrepente me desperte del sueño.
Al despertarme me encontré en una cama rodeada de cuadros con mujeres. Tenia miedo.
Desde la habitación se veía todo un bosque en el que había un lago y árboles que le rodeaban. Yo estaba tumbada, me levante de la cama estando un poco mareada, me sujete a la mesita de noche de al lado para que mi cuerpo no acabe en el suelo, pude recuperar energía un poco y me solté lentamente del apoyo del mueble, pero justo en ese momento alguien entró por la puerta a la habitación y en ese instante me desmayé, sentí como alguien me había cogido en brazos y me dejaba en la cama. Al despertarme de nuevo me encontraba en la misma cama pero esta vez tenia en frente a un chico rubio con una sonrisa diabólica, que lo que hacía era intimidarme. Me toque el cuello sentí como un dolor, así que me levante rápidamente hacia el teléfono apartando aquel chico que estaba sentado en los pies de la cama y al ver me en el espejo tenia como una especie de mordedura de serpiente en el cuello. Justo en ese momento entraron más personas, bueno si lo eran.
-¿Qué hacés aqui Óscar?- dijo uno de ellos mientras me giraba después de mirarme en el espejo.
- Nada, simplemente saludando a nuestra invitada que acaba de llegar-. Dijo Óscar con la misma sonrisa que antes. El chico que se dirigió a Óscar se acercó a mi rápidamente y me miró el cuello y dijo.- ¿Quién ha sido? Sabéis perfectamente lo que no dijo Dennis, no la podemos tocar, así que ¿Quién ha sido?- Todos los que estaban en la habitación, es decir, las cuatro seres, se miraron unos a otros.
-He sido yo Amadeus- Dijo Óscar.
-Para la próxima no te la perdono Óscar como vuelvas a tocarle un pelo te prometo que no la cuentas, ¿entendido?-. Dijo él tal Amadeus mientras tenia entre sus manos el cuello de Óscar.
-Amadeus dejalo no vale la pena-. Dijo una de las dos chicas que se encontraba en la habitación, mientras intentaba separarlos a ambos.
-Salir todos por favor-. Dijo la otra. Parecía la más centrada. Tenia el pelo negro, ojos de color rojiso como cuando el sol se esconde y el cielo se vuelve rojizo con una mezcla amarilla, con una piel blanca y frágil como la porcelana.
-Hola me llamo Guchy. Como ves todo esto te parecerá extraño pero no te preocupes no te va a pasar nada solo necesitamos tu ayuda para salvar a la novia de Dennis que esta muy mal porque un drower la ha herido gravemente. Un drower es un súbdito de los drows como sabrás muy bien creo yo- Dijo la chica mientras me sentaba en la cama.
-Sí se exactamente quienes son pero ¿para que necesitáis mi ayuda? No tengo poderes-. Dije yo.
-Ya lo sabemos pero tu hermano hará lo que sea si le damos a su hermanita a salvo, pero espero que no nos diga nada por el idiota de Óscar-. Dijo ella apartando la mirada.
-¿Qué tipo de ayuda es?-. Dije yo.
-Somos vampiros-. Dijo Guchy. Me asombre tanto que me levante de la cama de un golpe alejandome de ella.
-Sí, somos vampiros. El problema es que Dennis se enamoró de una licantropa por lo que la familia de lobos no está de acuerdo. Nunca nos hemos querido relacionar con ellos pero Dennis e Ivonne se enamoraron, por mala suerte, entonces su familia la secuestro en el bosque para ir a matar a Dennis, fue entonces cuando Ivonne se escapo y fue atacada por los drowers pero fue salvada por Amadeus quien se la llevó a los lobos, pero no sabían que hacer hasta que Dennis se las arreglo y nose como te encontró-. Dijo ella dirigiéndose a la ventana en vez de a mi.
-Entonces ellos vendrán aquí ¿no?-. Dije yo tocándole el hombro izquierdo. Ella me contesto que si,que mi hermano y mis demás compañeros vendrán pero no tenia ni la menor idea de como iba a salvar mi hermano a Ivonne.
Se escucharon gritos en la entrada y Guchy salió disparada de la habitación pero en plan como si tuviera una fuerza de velocidad, dejo la puerta abierta y aproveche a salir yo también. Los gritos provenían del salón, así que me acerqué lentamente, eran los lobos con Marcus, Escarlata y Falcón. Fui corriendo hacia ellos pero Óscar se puso en mi camino impidiendo que los tocara.
-Ya sabéis cual es el trato guapetones, Ivonne a cambio de la querida hermanita-. Dijo Óscar
-de acuerdo¿Dónde está?-. Dijo Marcus con la cara llena de rabia y furia.
-Aún no ha llegado cariño -. Dijo una de las lobas que la sostenía.
-¿Como pensáis que mi hermano puede ayudarla?-. Dije yo mientras intentaba soltarme de Óscar.
-Pero bueno ¿es que tu hermana no sabe lo que es?-. Dijo Óscar cuando me soltó instantáneamente y yo me quede libre en medio salón intentando comprender a Óscar por la pregunta que acaba de dar.
-¡Cállate! Tu no sabes nada-. Dijo Marcus aún mucho más furioso.
-¿A que se refiere Marcus?-dije yo muy asustada y con lágrimas en los ojos.
