La cosa en el bosque

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...

A falta de presas en los alrededores, Nina se veía obligada a probar suerte en las sendas lindantes al bosque en busca de cualquier persona.

Con algo de suerte daría con algún corredor nocturno o parejas jóvenes en busca de una noche de pasión bajo las copas de los árboles, algo que Nina detestaba y por lo cual le era gratificante torturarles.

Sin la luna en el cielo solo el paseo al límite del bosque era levemente iluminado por los faroles a lo largo de él.
Algo impaciente y animada corrió a esconderse en la penumbra de los árboles,para su suerte la espera no fue mucha pues una pareja se paseaba por la zona, ambos jóvenes caminaban melosamente juntos mientras se hablaban cosas al oído y reían.

Escondida Nina se estremecía de emoción mientras aguardaba y calculaba su movimiento, esta vez no quería perder la oportunidad de torturar a alguien.
No podía con su emoción,pero pensaba esperar oculta hasta que estuviesen lo suficientemente cerca como para tomarlos por sorpresa derribando a uno para neutralizarlo y así poder atacar al otro, de ese modo luego podrían divertirse con uno de sus "juegos"

En cuanto los jóvenes pasaron junto a ella puso en marcha su plan cayendo sobre el joven haciendo que su cabeza golpeara el suelo y con ello perdiera el conocimiento, en cuanto a la chica no logro huir lejos ya que en cuanto Nina se puso en pie fácilmente alcanzó a su presa la cual detuvo su marcha al ser herida en un muslo con un cuchillo volador para luego ser fuertemente golpeada en la cabeza quedando inconciente.....

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Un dulce aroma invadía el ambiente, una mezcla de dulzura y metal. Aunque se encontrase dormido aquel aroma le instaba a despertar... y por primera vez saldría en su búsqueda.

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-Por fa-vor, p-por fa-vor... El llanto ahogaba las súplicas en  balbuceos.

-Oh vamos! Es divertido.
Mira que flexible eres.
El fuerte e inconfundible sonido de un objeto al romperse provocó una serie de gritos y gemidos de dolor.
-Tranquila aún te queda otro brazo.
Jajajaja!!!!
Veamos si la piñata tiene dulces.

-Déjanos en paz!! Por sobre ellas colgado en una rama el joven forcejeaba y maldecía a Nina. Invadido por la ira ignoraba la gran cantidad de sangre que perdía, lo cual provocó que se desmayara.

-Ja! Con esa actitud todos tus dulces han de ser agrios. En fin! Nosotras aún debemos terminar nuestro juego

El Caníbal Mudo (Jack X Nina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora