Sin Ley. | Fanfic | Harry Styles |

Capitulo 1

"Tu puedes Valentina tu puedes"

Lo repito una y otra vez mientras me miro en el espejo de mi habitación.

Estoy tan agotada, física y mentalmente, desde este ultimo mes eh estado sin parar con dos trabajos diferentes y uno mas pesado que otro, trabajó desde los 17 años, constantemente cambiando de trabajo asegurándome que la paga siempre sea mejor que la de antes, en este momento trabajo en un restaurante con música en vivo de jueves a domingo, y en una biblioteca de lunes a miércoles, y esto esta acabando lentamente conmigo, pero sé que lo hago por necesidad y todo esto vale la pena, ya después encontraré algo mejor con el que me encuentre más cómoda y se ajuste aún más a mis necesidades.

- Vale, esas bolsas debajo de tus ojos no me gustan- Mi abuelo me dice mientras se acerca lentamente a mi.

- A mí tampoco pero recuerda - me doy la vuelta para mirarlo - los medicamentos no se pagan solos y eso lo sabes.

Vivo con mi abuelo ya que cuida de mi desde que mis padres fueron brutalmente asesinados cuando yo tenia tan solo 3 años le agradezco a dios que me encuentre a su lado, no sé que haría si no lo tuviera conmigo él es mi motor de cada día.

- Pero me preocupa verte tan cansada hija - se sienta lentamente en mi cama.

- Estaré bien solo falta que me acostumbre a todo esto - me acerco a él para sentarme a su lado - tu cuidaste de mi, ahora me toca hacerlo.

- Si tan solo las cosas hubieran sido diferentes - dice acariciando mi mejilla.

Cuando apenas había cumplido los 17 años todo cambio, todo empezó cuando en la fabrica donde mi abuelo trabajaba sintió un dolor insoportable en la pelvis, el cual hizo que fuera llevado al hospital de emergencia, después de cientos de estudios fue cuando nos informaron que tenía un tumor en la
zona pélvica y tenia que someterse a una cirugía para extirparlo y así comprobar si ese tumor era maligno o no, tuvimos que invertir el dinero que era para mi universidad que con mucho esfuerzo mi abuelo junto durante todos esos años, pero era para su bienestar, después de la cirugía el doctor nos informo que mi abuelo había sido diagnosticado. con Fibrosarcoma un cancer en los tejidos blandos de los huesos, que suele atacar la pelvis, los brazos y las piernas, era maligno pero aún así fue diagnosticado a tiempo, nos dio indicaciones de que se tenia que someter a radiaciones y quimioterapias como parte del tratamiento. Todo marchaba bien después de eso hasta que un año después el cancer ataco el brazo izquierdo el cuál tuvo que ser amputado de inmediato para que la enfermedad no siguiera propagándose, así que mi abuelo tuvo que dejar el trabajo para estar al cien con sus tratamientos y medicamentos. Desde ese momento me dedique completamente a él y al trabajo, una cosa buena es que el gobierno nos da una pensión cada mes es poco pero siempre ayuda.

-Pero lo importante es que estás bien y que estás a mi lado - le dedique una sonrisa para tranquilizarlo

- Lo se mi pequeña pero - da un suspiro largo - casi tienes 20 años y no sabes como me hubiera gustado que hubieras asistido a la universidad.

Los planes que ambos teníamos para mi era estudiar la carrera de derecho, que era mi sueño desde los 16 años, y mudarnos a Los Ángeles y dejar atrás nuestra vida en San Jose.

- Por algo pasan las cosas y nuestra vida no es tan mala - le dedique una sonrisa- así que tu quédate tranquilo.

- Ay Valentina eres idéntica a tu madre - me miró con ternura - siempre tratando de encontrar el lado bueno de las cosas - le sonrió y miro al suelo- por cierto recuerda el viernes es tu cumpleaños - dijo levantándose lentamente - y espero que te guste el regalo que tengo para darte.

- Sabes que no es necesario abuelo - levanto la mirada y le tomo la mano y la aprieto un poco- con tenerte tengo.

- Cuanto me gustaría poder abrazarte con ambos brazos - sus ojos se inundan de tristeza, cuando estoy apunto de decir algo me interrumpe - ahora duerme que mañana tienes que ir a ese mugroso restaurante.

El Joe's Restaurant es uno de mis trabajos y desde el principio a mi abuelo no le agrado nada, dice que no es un lugar para mi e intento convencerlo que es mientras encuentro otro trabajo y que nos ayudara a salir adelante pero aún así no le agrada y no cambiara de opinión.

- Ya perdí la cuenta de cuantas veces hemos hablado de eso - río en voz baja.

- Lo sé - se acerca a la puerta lentamente para salir - recuerda solo dos días y tendrás 20 años.

- Como ha pasado el tiempo - miro a mi al rededor mientras pienso en mis padres y en cuanto me gustaría que estuvieran aquí.

- Están orgullosos de ti hija - me dedica una mirada comprensiva - ahora solo intenta descansar.

Cierra la puerta, e inmediatamente me tumbo en la cama solo pensando en el sueño que tengo así que con las pocas energías que me quedan me acomodo entre las sabanas y estiro perezosamente mi mano para apagar la luz, cuando solo la luz de la luna envuelve la habitación me siento tranquila y aliviada

"No te desesperes, todo está y estará bien."

Digo para mis adentros, entonces cierro los ojos para lentamente entrar en un sueño profundo.