Alix

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No recordaba nada, sólo un golpe en la cabeza y ni siquiera sabia donde me encontraba, todo era muy extraño, estaba en un lugar oscuro, se vea la luz tenue de algunas lámparas alejadas, pero en la misma habitación, no sabia quien era, ni porque estaba ahí, intente tocar mi cara o levantarme, pero me tenían atada de brazos y piernas, intente gritar, pero solo se escuchó un quejido, tenía las cuerdas vocales destrozadas.
-4 23*, repito, 4 23 en la sala 3, ala norte- oí mientras escuchaba pisadas que iban hacia mi dirección, me sobresalte al sentir una mano tomando mi muñeca, era una mano fuerte, pero no me hacia daño.
-luces de la habitación 854- dijo y en un segundo toda la habitación se iluminó, lastimando mis ojos, era luz blanca, demasiado intensa para mi condición. Cuando mis ojos se adaptaron a la luz, mire a la persona que estaba ahí, oh Adonis, pero eso no hacía menor el hecho de tenerme atada de brazos y piernas, él se aclaro la voz y me dijo -Soy el Doctor Astor- su voy era sexy y profunda, lo mire confundida, ¿que hacía en un hospital? Y si no era un hospital ¿en donde carajo estaba? Comenzaba a desesperarme, el sonrió, lo cual solo me hizo enojar más
-y no, esto no es un hospital, ¿recuerdas tu nombre?- hice mi mayor esfuerzo por recordarlo pero negué decepcionada. Su sonrisa se hizo maliciosa lo cual me dio escalofríos y me dijo -bien, te llamarás Alix, ahora vendrá un guardia, él es Maxwell y la llevará a asearse, señorita- en ningún momento se me volvió a acercar el doctor después de lo que me dijo, Maxwell comenzó a romper las ataduras de mis brazos y piernas y me ayudó a levantarme, su ceño estaba fruncido y no decía ni una palabra, intente caminar, ya que él me soltó por un momento, fue muy mala idea, estaba débil y en seguida caí al piso, la habitación era de un blanco inmaculado que daba miedo. Maxwell se sorprendió cuando me vio en el piso y se apresuró a levantarme, le di las gracias con los ojos, pues mi garganta estaba destrozada, me llevo a una habitación más pequeña, en esta había un baño completo y había una muda de ropa en lo que debería ser la cama, que sólo era una placa de plástico, pegada a una pared, se veía muy poco cómoda, pero solo quería descansar. Maxwell me indico donde estaba todo y se quedó en la puerta de la habitación serio mirando a la nada, entre a bañarme y salí con una muda de ropa, parecía un uniforme, era de color gris oscuro, y tenía el nombre Alix en el lado izquierdo del uniforme cerca del hombro. Recogí mi cabello y me senté en lo que debería ser mi cama. Mas tarde tocaron la puerta y Maxwell abrió la puerta tomando una bandeja con comida, los cubiertos eran de plástico, y todo era una especie de puré, daba asco, pero tenía hambre, le agradecí en un hilo de voz a Maxwell y comencé a comer, no se cuantos días llevaría inconsciente, ni cuanto tiempo llevaba sin comer, pero ese día por primera vez en mucho tiempo me sentía saciada. Deje la bandeja a un lado, y dormí.

MI sueño era un poco borroso, pero escuchaba claramente -Alessia, debes preparar tu discurso para las elecciones de este año- yo asentí levemente, no la reconocía, no sabia quien era ella, pero sentía que la conocía desde mucho tiempo.

Desperté sobresaltada, Maxwell seguía en la puerta, su cara no mostraba ninguna emoción, siempre estaba serio, me aclare la voz y le dije -¿cuanto tiempo he dormido?- pero mi voz era apenas audible, él me miró y respondió seco -tres días- lo mire sorprendida y gire a ver la pared perdiendo mi mirada ahí. Después de un tiempo, no estoy segura si hayan sido minutos, horas o días, tocaron la puerta, Maxwell frunció nuevamente el ceño y yo me inquiete, él sabía algo, los dos nos miramos pero ninguno dijo nada, seguían tocando la puerta y yo sentía como se me secaba la boca. Me levanté cuando Maxwell abrió la puerta, fuera había un guardia, eso solo significaban noticias malas. — Alix, acompáñame.- el guardia sonrió de forma perversa, lo que me hizo retroceder, Maxwell frunció el ceño ante sus palabras, ese chico se comportaba raro. No quería poner resistencia y que me volvieran a sedar, por lo cual, lo acompañe, Maxwell iba detrás de mi a una distancia razonable.

*4 23: la paciente despertó.

Espero no descuidar ninguna de las dos historias, los amo ❤

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⏰ Última actualización: Apr 21, 2016 ⏰

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