Capítulo 1

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Me encontraba sentada en mi cama, mirando hacia la ventana mientras veia como el sol se iba poniendo.
No quería ir a la escuela, no me agradaban mis compañeros, no queria ver a los malditos profesores que no enseñaban ni una puta mierda.

Vivía con mis padres y con mi hermano no tan menor que yo.

Me levanté después de mirar por la ventana, fui a ponerme mi uniforme, ni siquiera me dio por hacerme una coleta.

Era el primer dia de clases. Los odio a todos.

Salí de mi casa y me quede parada en la cera, ya que Cassandra vendría por mi.

Después de esperar un par de minutos llegó Cassandra en su auto.

-¿Lista para irnos? - dijo con una sonrisa.

-Llegas tarde... - dije sin emoción alguna.

-Nunca cambias - dijo con un tono burlesco.

Me subí a su auto y nos fuimos, en el camino miraba por la ventana pensando en como seria mi dia de mierda.

Llegamos a la escuela y había una lista con nuestras clases.

-Lina...Lina...-Decía mientras con mi dedo indice buscaba mi nombre.

-¡No puede ser! - Gritó Cassandra al ver la lista.

-¿Qué pasa?-Le mire algo asustada.

-¡Me dieron química! -Hizo un puchero a la cual yo solté una ligera risa.-¿Qué es tan gracioso?-Me reprendió con su comentario.

-Química no es tan malo, además nos tocará juntas.-Digo mientras le señalo mis clases.

Cassandra se me adelantó, no tenia ganas de entrar, tocó la campana y seguía sin entrar,los odiaba a todos no quería ver a mis compañeros.

-Veamos... Seis clases... Tres por día por dos horas... Dos recesos...- Di un ligero suspiro-No suena del todo mal... Primera hora ingles, segunda matemáticas,tercera química, cuarta ingles, quinta educación física y por ultimo artes.
 
Después de dar un repaso a mis clases  por fin entre a mi clase ya llevaba 10 minutos afuera.

No quise ver quien estaba dando las clases, solo entré y me fije en mi asiento, Cassandra estaba a mi lado al parecer teníamos algunas clases juntas.

-Buenas tardes... -dijo el maestro con un tono sarcástico.

-Tenemos maestro nuevo - escuché como Cassandra me susurraba, parecía un poco emocionada.

Volteé a verlo de reojo y bufé.

Me senté y solo puse mi cabeza en mis manos, me recosté en el mesabanco y cerre mis ojos.
Me daba igual todo.

-Señorita... - me reprendió el maestro que estaba alado mio con los brazos cruzados -. ¿Puede repetir lo que acabó de decir?-

-No - dije acomodando mi cabello hacia atras ya que estaba recargada en el mesabanco.

-¿Por qué? - dijo levantando una ceja.

-Porque no puse atención - dije levantando la cara.

-¿Me podria decir por qué? - dijo cruzándose de brazos.

-La verdad me importa un comino lo que esta explicando.

-Acompañeme con el director y veremos que dice su madre.

-No creo que le importe. -dije sin preocupacion.

-Entonces supongo que a usted tampoco le importara si la suspendo unos días.

Llevame A Un Lugar LejanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora