ENCADENADA (diabolik Lovers Y Tu)

capítulo 3

- abrí lentamente mis ojos y me encontré en una cómoda y placentera cama - que alivio, fue sólo un sueño - cerré los ojos de vuelta, pero los abrí muy asustada- ¡un segundo! ¡Este no es mi cuarto! - Me había despertado en un cuarto muy hermoso color rosa claro, el problema era que, ¡¿qué hacía ahí?! ¡Acaso lo de ayer fue real! - No, no, ¡no pudo a ver pasado! Estoy un 99% segura que los vampiros, ¡no son reales!

Azusa: y... Que... pasa... con... el... 1...%...- dijo por atrás una voz que reconocí al instante y me hizo caer de la cama

- ¡Dios! Deja de aparecer como ninja!!! Pero.... - Antes de seguir peleando recordé lo de ayer y mi cuerpo quedó paralizado – a, ¡aléjate! ¡Monstruo!

Azusa: por...que...dices......eso........., acaso.....no.....me....dejarás......tu.....sangre.......

- ¡Claro que no! ¡Ah ninguno! ¡Tengo que irme! - Quise correr pero el tal Ruki me detuvo

Ruki: ¡porque haces tanto escándalo! Mira te lo dejaré claro. Solo saldrás de aquí muerta, ¡así que compórtate!

- No pueden hacerme esto...

Ruki: claro que sí, ahora acostúmbrate y baja a desayunar- dijo eso con tanta naturalidad y desaparecieron, acaso querían que me quede ¡en esta casa! ¡Dónde probablemente quede sentenciada! Y no tengo mi ¡teléfono!

- ¡necesito hablar con mi padre! Un segundo - quede parada al recordar que yo siempre guardaba un celular de emergencia - ¡mi celular! - Corrí hacia mi maleta y en el fondo saque mi teléfono, marque a mi padre y cada timbre se me hacía eterno

Tsubasa: hola

- ¡Papá! - Empecé a llorar - por favor, ¡tienes que sacarme! Ellos son ¡monstruos! Por favor.... - Dije ahogándome en llanto

Tsubasa: hija.....- su tono parecía molesto - ¡no vuelvas a llamarme! ¡Olvídate de mí! Entiende ¡ya no te necesito! - Grito y colgó

- pero...- esas palabras rompían mi corazón, me sentía destrozada, era verdad ¡el me vendió! - No me importa Nada... ¡Nunca más regresaré con junto a ti! - Las palabras de ese señor hicieron, me hicieron dar cuenta que jamás me quiso, lo único que deseaba ¡era deshacerse de mí! - ¡No me importa vivir aquí! Pero no regresaré contigo ¡jamás! - Estaba tan molesta que vote el teléfono, después que me tranquilice, me di cuenta lo que hice - ¡no! ¡Mi bebé! - Lo levante y escondí, por cual quiere cosa - bien si lo que tengo que hacer es quedarme aquí, para no volver a ver al que decía ser mi padre, ¡pues lo haré! Pero antes debería implantarme reglas como estar lo más alejada a ellos que pueda - me recosté en la cama - Mierda aún me duele - dije tapándome el cuello, ese era el lugar que más me dolía - debería cambiarme, no quisiera estar a solas con uno de ellos, aunque creo que lo más peligroso es estar con todos juntos - me levante y puse un calentador lila, salí del cuarto y baje, vaya aún no puedo creer que sean vampiros, esto parece una película de terror, entre con miedo, pero me sorprendí al ver a todos riendo y jugando, enserio me los imaginaba comiendo animales vivos o algo así

Ruki: al fin bajaste, pensé que tendría que ir por ti

- ¿¡Por mí!? No gracias ahí estoy bien - me senté junto al idiota que rompió mi teléfono, como era su nombre, kau, kiu, como era

Yuma: ¡kou! - Ah kou jajá ese era- Ya has comido mucho, ¡Déjamelo a mí! - Se abalanzó sobre él, pero él se metió el pedazo de comida en la boca, esto era divertido - ¡Te comiste mi pedazo!

Ruki: ya callen, aquí tengo mas

Kou: ¡yo quiero! - Se abalanzó pero Yuma, le quitó el plato