viernes, 17 de mayo de 2013
Querido diario.
Estas semanas me eh estado sentido algo mal…(tal vez a causa de mi débil cuerpo)
En la escuela me esta llendo mas o menos…Soy tímida y mi estúpida arrogancia no me ayuda en nada. Solo tengo 2 amigos, Alex y Naomi ellos fueron los únicos que lograron entender el por qué me sentaba sola en los almuerzos y por qué era tan arrogante. “Estaba sola, sin nadie…”
Para mi mala suerte no todos me evitan, en prepa hay un grupito de chicas que les gusta abusar de otros…Todos les llaman “Pandilla Rosa” jajaja algo estúpido el nombre, no?
En fin el grupo esta comandado por la exnovia de Alex…la maldad viva en botellada en una Barbie de porcelana.
Justo cuando creí que el demonio no tenía nombre…si lo tiene y se llama Barbara Srikes. Se ha encargado de hacerme la vida imposible, aun no comprendo ¿Por qué me odia?
Vale, no dejare que eso me afecte…
Ya ire a dormir… es tarde.
°Al dia siguiente °
- Sarah, baja!- la voz ronca de mi abuela sonó por todo el corredor penetrando mi puerta y mis oídos.
- Vale…-dije cansada.-
Otra vez no pude dormir, el mismo sueño…
Estoy amarrada a una cama con un vestido negro rasgado.
Se siente tan real.
Una figura extraña se acerca.
-¿Qui-Quien eres?- solo puedo articular eso.-Si vas a matarme hazlo…no necesito perder el tiempo con jueguitos-dije valiente, no es que no le tuviera miedo a la muerte, pero ahí va mi personalidad arrogante, hablando por mi.-
El chico se acerca.
No logre ver su rostro solo su sonrisa…algo perturbadora…una sonrisa que solo un loco puede tener.
“Casi perfecta.” Susurra.
Note que deslizó un cuchillo por mi pierna.
-No gastes tu tiempo…-le dije- No te temo...-
Solo me dedica una risa perturbadora y me encaja el cuchillo en el abdomen dejando fluir mi líquido carmesí.
En ese momento despertaba.
Sarah POV.
Me encamine hacia mi escuela, aquí en Crows tienes que caminar mas de 1 kilometro para llegar a la escuela. Bueno si eres yo, no tienes otra opción más que caminar.
Los demás eran llevados por sus padres o tenían su propio auto o incluso andaban en bicicleta.
Para alguien como yo que perdió toda su familia y vive de la pensión de su abuela, solo le queda caminar.
Sí, mi familia está muerta. Antes de venir a vivir a Crows el lugar más frio y triste de Nueva Zelanda, solía tener una vida más feliz.
Bueno se podría decir feliz. La familia Druitt vivíamos en una lujosa mansión en Nueva York. Miles de personas nos servían, mi padre era el dueño de la compañía Druitt (una juguetería y dulcería) la más famosa de aquí.
Pero como a toda familia millonaria fueron estafados y asesinados.
Yo? Gracias a mi madre que ponía mucha gente a mi cuidado, logre escapar y hui…manteniéndome con vida, como una cobarde.
Vi el momento en el cual el cuchillo atravesó el rostro de mi padre, desfigurándolo.
Pero no quiero recordar eso ahora.
De que hablaba? Ah sí, después de unos días de vagar por toda Nueva York, mi tío Alois me trajo a Crows a vivir bajo la tutela de mi abuela (70 años).
Me inscribió a la secundaria de Crows, este ya es mi último año. De hecho estoy atrasada un año, yo debería estudiar en preparatoria.
En fin, con el clima tan bipolar de Crows tenía que vivir con un suéter enorme y con un paraguas dentro de mi mochila.
-“Ya no puedo” me dije ya había caminado mucho y aun no me acercaba a la escuela. “Debería parar… además ya perdiste la primera hora” Qué más da… “Tal vez debería tomar un atajo por el bosque” seguí el rumbo hacia el bosque, quería llegar para la 3 hora o incluso para tomar el almuerzo.
Seguí caminando como 30 minutos sin un rumbo por los árboles. Mis piernas ya no daban para más…así que me senté en un tronco y me recosté un poco…
De la nada escuche algunos sonidos extraños. Algo así como si alguien estuviera encaminándose hacia mi, asi que abrí rápidamente mis ojos. En el arbusto había algo…
Rápidamente el miedo inundo mis rodillas las cuales se tambaleaban como 2 flores tratando de sostener una roca. Algo imposible…
-Sal ya!- dije
Mi miedo desapareció y algo de vergüenza hizo que soltara una pequeña risa, mi atacante era un pequeño conejo, no dude en acariciarlo y cargarlo.
-Hola, pequeño…eres muy lindo, vaya tu también estas solo?- el pequeño conejo mordisqueo mi dedo.- tienes hambre?...lo siento amiguito solo tengo una manzana…¿a los conejos les gusta?-
Me sentí algo estúpida hablándole a un pequeño animalito que sé que no me respondería.-¿Quieres un poco?- trate de meterle algo de manzana en el hocico.
-A el, solo le gustan las zanahorias…- una voz ronca se hizo presente…
-¿Tu?...¡Eres aquel!-
Un frio ataco mi rostro, no olvide ese sentimiento de terror, era el mismo de mi sueño.