PRISONERS [L.S.]

001

-Louis William Tomlinson. Diez años en prisión- sentencia el juez desde el estrado. El joven cierra los ojos fuertemente al oír aquellas palabras.

Diez años. Diez malditos años ahí dentro, no, no quería quedarse ahí; quería forjar una carrera, ser un profesional, tener dinero y sacar a su madre y hermanas de la miseria en la que vivían, por la cual se vio obligado a robar.
Claro, sin saber que sería atrapado por el hijo de puta gruñón dueño de la tienda.

Oficialmente, era su fin.
<<Maldito viejo hijo de puta>> volvió a pensar el ojiazul. Odiaba con todas sus fuerzas a ese señor, con sólo recordar que iba a estar en sus brazos por una caja de diez huevos cuando recién cumplía los doce, le daba repugnancia.

Sólo quería aprovecharse de él, y meter su polla en Louis. Gracias a alguien ese día no llegó y se liberó de él. Hasta ayer, que tomó una cajetilla de cigarros, cinco piezas de pan y un poco de mantequilla sin pagar. Obviamente se dio cuenta de ello, y llamó a la policía, alegando que se había robado el dinero de la caja.

Louis lo negaba hasta el cansancio, pero por más que lo hizo su sentencia fue peor. Golpeó a un policía con una silla en la cara, dejándolo inconsciente e insultó al juez. Cosa que subió más su condena.

-¡No puede hacer esto!-. Exclamó la madre del chico al ver el ojo de su hijo con un moretón, estaba al borde de las lágrimas

-Saquen a esa señora-. Gruñó el juez mirándola. La mujer simplemente se quedó callada, mirando como trataban a su pequeño. Golpeándolo sin piedad.

Se culpaba de todo lo que le pasaba a su hijo. Y sí, era culpa suya por no haber hecho lo suficiente para evitar que cayera en la cárcel. Se la pasó lamentando por mucho tiempo que el padre de sus hijos la dejara sola con ellos, sin hacerse cargo de su responsabilidad.
Desde el momento en que se fue, Louis al ser el único hombre, se hizo cargo de sus hermanas a toda costa. Incluso robando si era necesario

-Nos vemos dentro de diez años, señor Tomlinson-.
<<Hijo de puta>> pensó Louis al mirar al hombre de barba hablarle, era un completo idiota y sí lo supo desde el principio

-No te preocupes, mamá. Estaré bien. Créeme-. Susurró el ojiazul al pasar a un lado de su madre con las esposas por la espalda, y los policías atrás de él.
La mujer comenzó a llorar aún más fuerte, al ver a su corazón como ella decía, siendo trasladado a las Islas Soledad.

-¡Haré lo posible porque tus hermanas estén bien, Louis!-. Exclamó. El ojiazul asintió aunque su madre no lo viese. No se resistiría a ser llevado a ese lugar si ese era su destino, lo tomaría. No importaba qué pasase ahí dentro.

Espero que les agrade, es la primera novela Larry que hago en forma (tengo otra pero no la termine kfkanz) y pues sí les gusta me alegraría que la compartieran voten y comenten
Espero poder subir pronto el capitulo 2, si me tardo es porque quiero que me salga bien todo (y que me llegue imaginación bxlabx)
Muchas gracias por leer

Ale