Solo Un Momento.

parte #4

Cambie la ruta de tu cuerpo, y te dejé del lado del colchón, subí mi cuerpo sobre el tuyo y te plante un fino beso en la comisura de los labios, quise decirte algo, lo que fuese, pero que sonará atrevido y encantador, más sin embargo, tu sonrisa delató cualquier cosa que pudiese haber dicho ya, y solamente decidí amarte, pensando en que nadie más te había amado antes, pensando en que esa era nuestra primera vez...

Besé tu cara, absolutamente todo lo que había en ella, tu frente, tu entrecejo, ojos, pómulos, mejillas, nariz, barbilla
Y cualquier pedazo de piel que en mi ruta se cruzase, baje más y entre besos la mía tu cuello, o mordisqueaba un poco jugando contigo, mientras con las manos intentaba provocar aquellas sensaciones que tu me brindabas, aquel cosquilleo en el pecho,
Te quite la camisa de apoco y sentí tu abdomen contra el mío, tu bromeaste un poco y me hiciste reír, fui bajando, besandote de a poco y tu suspirabas, dejandote amar, de vez en cuando me tocabas, me distraias, hacías que me olvidara
A pesar de lo mucho que quería perderme ahí, entre tus manos y tu calor, entre tus mimos y tu olor,

Lo que más deseaba, era estar así, saboreandote lento, como si tuviesemos una eternidad para disfrutar de aquel momento, como si los relojes no fueran más que un pretexto, como si después de eso, no hubiese un mañana esperandonos.

Deseaba amarte así, sin prisa, y hacer el amor, dejar que el amor nos hiciera, y que desde ese momento, no hubiese nadie más, deseaba, saber que aquello, que ese proceso físico entre nosotros no era sólo sexo...

Deseaba hacerte sentir, que eso que compartíamos era la prueba irrefutable de un futuro concreto... de un amor, verdadero.
Baje tus pantalones, te quite la truza, y toque tu miembro erecto
Estabas húmedo y muy agitado, pero, de igual manera, te veías tan tierno,
A mis ojos éramos no más que una pareja mostrando sus lados más vulnerables, confiando el uno del otro
Tú miembro entró a mi boca e hice lo propio.