~Pase lo que pase, Siempre juntos~

Capitulo 1: Un día como cualquier otro.

     Prov. Normal

    Era un día como cualquier otro, la joven Marinette se había levantado tarde como siempre, mientras se preparaba rápidamente su pequeña kwami la miraba preocupada, no porque se le hiciera tarde, si no por qué hace apenas ayer la joven se había quejado de un dolor en sus piernas, la criaturita no podía dejar de pensar en el tiempo cuando no estaban juntas, cuando Marinette no podía mover sus piernas. ¿Y si ella estaba volviendo a re-caer? Eso podría ser un problema para su deber como Ladybug. La joven de ojos azulados se dio cuenta de la preocupación de su pequeña compañera, tome su bolso de siempre y se acercó a su kwami.

-Tikki no tienes de que preocuparte, lo de ayer fue sólo un poco de dolor, tal vez ocasionado por el cansancio de ayer tras pelear con ese akuma. Así qué, no te preocupes, si?-dijo Marinette con una sonrisa brillante y hermosa

  La pequeña Tikki le devolvió la sonrisa y entro a su bolso

-Esta bien Marinette no me preocupare tanto, pero si vuelves a sentirte mal, le dirás a tus padres, si?-dijo Tikki sonriendo

-Esta bien, por ahora tengo que llegar rápido a la escuela

     Al decir eso Marinette salió de su habitación corriendo, como era tan tarde no tomó su desayuno, cosa que después Tikki le reprendió, la chica sólo se limitó a correr lo más rápido que pudo; al llegar a la escuela y correr así su aula, por suerte para ella la profesora había olvidado unas copias y no tuvo tiempo de pasar asistencia, rápido se sentó al lado de su mejor amiga Alya y está la miro preocupada, ella era la única en toda la escuela, con excepción de los profesores y director, que había estado enferma por mucho tiempo hasta hace poco.

-Hey Marinette, hoy ya es demasiado tarde incluso para ti, ¿estas bien?-le dijo su amiga morena preocupada y susurrando, después de todo, la oji-azul no quería que nadie supiera lo que le pasaba

-Claro, sólo me quede dormida y me olvide de poner la alarma, lo siento si te preocupe Alya- contesto la peli-azul sonriéndole a su amiga y esta le devolvió la sonrisa un poco más tranquila

     Marinette giró su vista hacia en frente y vio al rubio de ojos verdes más lindo de toda la escuela, la gran mayoría de las chicas se derretían por el y Marinette no era una excepción, a ella también le gustaba MUCHO ese chico, el fabuloso Adrien Agreste, aún que le gustaba tanto, sabía que no tendría ninguna oportunidad con el, era simplemente inalcanzable para ella. Cada vez que intentaba hablarle, decía puras tonterías o simplemente no podía hablar de los nervios, quería confesarse pero no tenía el valor...si tan sólo tuviera el mismo valor que tenía su alter ego Ladybug, podría confesarse y sin importar que fuera rechazada, ya que había rumores de que a Adrien ya le gustaba una chica, Chloe su compañera de clase siempre presumía que esa chica era ella pero nadie le creía sólo su amiga y seguidora Sabrina.

     Cuando la profesora regreso empezaron las clases, todo era como siempre, transcurrían las clases una por una hasta que de repente se escucho un estruendo, era un akuma causando problemas, rápidamente la profesora le dijo a todos que se fueran y pusieran a salvo en sus casas, todos se fuentes con excepción de Marinette, ella se fue a un lugar cerrado para transformarse en Ladybug, mientras en otro lugar estaba Adrien se escondió en un armario, abrió su mochila y de allí salió una criaturita negra con un pedazo de queso

-Cielos, parece que los akumas están más activos en estos días-dijo el pequeñín con un torso de queso en sus pequeñas manos

-Tal vez, pero ahora tengo una oportunidad para ver a mi Lady, vamos hay que ir rápido Plagg-dijo el chico rubio mientras que Plagg era absorbido por el anillo que plata que llevaba

    Adrien se transformó en su alter ego, Chat Noir, el compañero y enamorado de Ladybug. La pelea contra en akuma fue más fácil que de costumbre, aún que como siempre buscaba los miraculous de los dos héroes, cosa que no podían tener nunca, sin su miraculous Ladybug o mejor dicho, Marinette podría volver al hospital de inmediato, al terminar con el akuma y purificar a la pequeña mariposa, los dos héroes chocaron puños en señal de haber terminado con el trabajo

-My Lady, estuviste un poco lenta hoy, ¿te paso algo? O es que yo me eh vuelto más fuerte-dijo el gato con una sonrisa al final

-Que molesto eres gato tonto, pero no te preocupes, sólo eh estado un poco cansada desde ayer-dijo Ladybug riendo y sonriendo

-Bueno, en ese caso, My Lady espero verte en la noche para el patrullaje de hoy-dijo Chat tomando una de las manos de la heroína y dándole un pequeño beso

-Basta pequeño minino-empujo al héroe con un dedo aleja sólo un poco de ella-Estaré allí, por ahora me tengo que ir, nos vemos-le guiñó un ojo y se disponía a irse, pero Chat la detuvo

-Espera, ¿no crees que va llegando el momento de que me digas quien eres?

-Chat....lo siento pero si te lo digo vas a querer saber más de mi, y eso ocasionaría problemas-dijo la chica sería, ella no quería que su amigo y compañero se preocupara

-Pero llevamos tanto protegiendo a París, yo deseo poderte conocer no sólo como Ladybug si no también como eres en tu vida cotidiana-le respondió Chat un poco desilusionado

Ladybug se le acercó y acarició su cabeza, cosa que sonrojó al héroe gatuno

-Tal vez algún día te lo diga, pero no hoy y tampoco mañana pero algún día lo sabrás, te lo prometo, por ahora, sólo nos veremos hasta la noche, adiós minino-después de decir eso con una brillante sonrisa se fue.

   Chat se quedo atontado por la sonrisa de su amada, no podía esperar a que llegara el día en el que al fin supiera quién es su amada Lady, y que desde ese día estuvieran más unidos que nunca. Pero.... si llega a saber quién es su amada, ¿cómo reaccionaria al saber que ella no siempre estará allí para ayudarlo? ¿Se le romperá su corazón, si llega a saber que su Lady moriría si no fuera por su miraculous?