Lumbra : Un amor de maldad

Historia de una sombra

En una noche cálida en el imperio de Cristal, dos ponys, los reyes del imperio, estaban en su día especial, la reina iva a dar a luz a su bebé,el rey estaba feliz y al mismo tiempo preocupado por el bebé y su esposa.
La reina gritaba de dolor, no aguantaba las contracciones poco a poco eran más seguidas, el rey ordenó a los guardias que  calmen al pueblo, estaban muy preocupados por ella. El rey se preguntaba si el bebé iva a ser niño o niña no podía esperar. Mientras tanto en la habitación donde estaban los reyes esperaban la llegada del pequeño bebé. Los doctores calmaban a la reina, ella hacía lo posible para poder dar a luz al bebé. Corría mucho viento, el momento de dar a luz se aproximaba, la reina daba su mayor esfuerzo posible, casi no podía respirar y nació, un pequeño príncipe al que el rey quiso ponerle Darknight, pero la reina dijo, que una criatura tan tierna y bonita no podía tener un nombre no muy simpático así que la reina lo llamó  "Sombra".

Cuando Sombra nació lo presentaron a todo el imperio nombrándolo "El príncipe Sombra".
El pequeño Sombra fue creciendo pasando los años, y obviamente tuvo sus experiencias más importantes de la vida, Sombra entró al jardín de niños mágico, su primer día en la escuela, su graduación, etc.
En el jardín de niños, Sombra deseaba tener amigos, ponys con quien hablar y pertenecer a algún lugar. Pero no fue así, todos le hacían bulling llamándolo "Sombrero" o lo llamaban "Sombrero rico".
Él siempre se sintió mal, hasta hablaba con los profesores/as por lo que le hacían, pero todos le decían lo mismo una y otra vez "Sombra sé bueno y te pasarán cosas buenas" .Sombra siempre seguía sus consejos pero parecía que todo lo malo le pasaba aunque tratara de ser un buen pony todos los días. Sus padres se enteraron sobre lo que le hacían, Sombra le rogó a sus padres que no se quejaran con el jardín de niños, él quería tratar de defenderse por su cuenta. Sus padres pensaron que él era muy pequeño para eso, pero para ser un  buen heredero tenía q madurar temprano. Así fue, maduró y aprendió a defenderse sólo, en la escuela le pasó lo mismo que en el jardín de niños, así que él se convirtió en el rey de la escuela y muchos le tenían miedo. Sus padres preocupados por su hijo, hablaron con él y no pudieron hacer nada para volver a hacerlo un niño bueno.
Creció y tuvo su graduación, pero no lo disfruto tanto como los demás compañeros de su promoción. Él se quedó en un rincón con sus padres ambos estaban felices por él, pero él no, trataron de subirle el ánimo  pero no funcionó, el había madurado tempranamente.

Años más tarde Sombra sufrió lo peor que pudo sufrir un pony, la muerte de sus padres. El funeral fue callado, pero muy callado que hasta se podía escuchar el sonido de los grillos. Todo el imperio estaba allí, nadie habló en el funeral, apenas la bibliotecaria dijo algunas palabras y los demás no. Los potrillos tenían la mirada baja, y sus padres deprimidos por la pérdida y Sombra  no dejaba de mirar las tumbas de sus padres, en el interior lloraba y no podía creer que los había perdido. Todos se iban uno por uno y el último en irse fue Sombra una serie de recuerdos pasaban por su cabeza reviviendo los momentos felices y amorosos que compartió con ellos.
Tres meses después Sombra se convirtió en el rey del Imperio De Cristal y con la tragedia de sus padres dejo de ser un buen pony y se convirtió en el rey más cruel y temido de Equestria, su crueldad, odio y miedo hacia los demás lo llevo al camino de la magia negra que le dio nuevas habilidades, en convertirse en una sombra y hacer cristales negros, así eso afectó su Cutiemark y al mismo tiempo un poco de su apariencia, pero su forma de ser era más malvada y egoísta. Se apoderó de todo el poder del Imperio, incluso pudo deshacerse de la cosa más buena e importante del imperio,"El corazón de Cristal " y lo escondió para que nadie pueda quitarle su reino al mismo tiempo que su vida no pasara a estar en peligro en ponys equivocados.

Ningún pony creyó que algo tan tierno pudiera convertirse en un ser  malvado y cruel.