Capitulo 4: Camila

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Narra Venus:

Entre a mi apartamento cansada, solo quería tumbarme en mi cama y dormir.

Pero hoy no podría ser.

- ¿Qué haces aquí mama?-pregunte cerrando la puerta de mi apartamento y dirigiéndome a mi madre

- ¿Qué no puedo visitar a mi hija favorita?-dijo abrazándome

Gire mis ojos, nunca he sido afectuosa con mi madre ni con mis hermanas, realmente con nadie. La única persona con que soy "afectuosa" es con Harry y obviamente en mi trabajo con los pacientes, porque luego vuelvo a ser la misma de siempre: Seca, enojona y deprimida.

Tal cual como me describe TODA mi familia.

Un rico olor me hizo despertar de mis pensamientos. Me dirigí a la cocina donde suponía que era el olor y me encontré con mis dos hermanas preparando una rica cena.

- ¿Qué hacen aquí?- pregunte seca

- Hay Venus que amargada- se quejó Graciela acercándose a mí- Te extrañe mucho

Me apretujo en sus brazos a lo cual yo respondí con desagrado.

- No nos vemos desde hace tres días- dijo sonriente Sofía

- Igual, las adoro tanto que cuando me mude fuera de la cuidad las extrañare mucho- me abrazo por al igual que  Sofia

Yo no respondía, solo me imaginaba la cara de Harry llorando y contando el relato.

Mi Eduarda merece un Oscar. En el sentido de que ¡Dios! Es tan fuerte. No es nada fácil encontrar a tu hija de 6 meses con una cortada en el brazo y al amor de tu vida ahorcada y peor aún: Sin vida.

Me imagino lo fuerte y horrible que debió ser para él. Pero aun así lo supero y pudo seguir adelante. En cambio yo sigo ahí estancada.

Es como si el destino no quiere que yo supere esa muerte, sigo llorando en las noches ademas de tener pesadillas con Melanie.

Mis hermanas y mi madre superaron y rehicieron su vida: Graciela se casara dentro de 2 semanas con un famoso empresario, mi madre se unió en matrimonio con un magnifico señor y Sofía bueno, debería tener el cargo que le dio mi mama en su empresa pero decidió no ejercer su profesión (que era administración de empresas) y entrar a un orfanato de monjas para poder ayudar a niños con problemas especiales.

Mis hermanas y mi madre establecían una conversación que enserio no llamaba mi atención. Solo estaba pensando en algo o mejor dicho en alguien.

Melanie.

Recordaba las veces que nos la pasábamos cantando juntas y correteábamos por la casa. Era algo hermoso, su risa era música para mis oídos.

Muchas personas piensan que estoy obsesionada con mi hermana. Y la verdad es que no, solo me hace falta y mucha.

- ¿Venus estas escuchando?- pregunto mi mama enojada

- La verdad es que no- dije seca

- Hay ya déjala mami- le regaño Graciela- seguro piensa en el papi de Harry

- Oh Harry te amo, te amo, te amo, te amo- repitió varias veces Sofía en forma de burla yo solo fruncí mi ceño

- ¡Okey chicas ya!- Rio mi madre- Déjenla vivir su amor platónico

Bien me canse.

- No pienso en Harry, segundo NO lo amo- dije enmarcando el "NO"- Y tercero no es mi amor platónico

You drive my life (H.S)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora