Volver a empezar (Harry Styles y Tú)

Capitulo 12: Un sueño movidito

Narra _____

Yo me levante de inmediato. Cuando le ví en la puerta, delante de nosotros, un temor tremendo recorrió mi cuerpo. Él estaba ahí, de pie, sin moverse

-Christian...

-¿Qué ha ocurrido aqui?

Dios, nos habia pillado. Estaba nervioso, acelerado y... ¿preocupado? De cualquier modo, nos habia pillado y todo por mi culpa. Yo me quedé totalmente paralizada en el sitio. Harry estaba delante de Christian, tal vez, preparado para recibir ese golpe que tanto se merecia en aquel momento

-Christian, puedo explicar esto-dijo Harry nervioso-Verás, yo...

-No hay ninguna explicación. Esta situación habla por sí misma-se acercó poco a poco a mi mientras miraba a Harry-No ves que está sangrando

-¿Qué?-Dijimos los dos a la vez

-¿Qué te ha ocurrido?¿Por qué tienes esa brecha en la ceja?

-Ah, la ceja...-dije aliviada-Es sólo un rasguño. ¡Ay! Pero no toques...

-Sólo ha sido el golpe, nada más. No creo que necesite puntos

-Gracias, Harry, ya me encargo yo

-Claro-él salió del baño y de la habitación, ya que oí un portazo 

-Tenia que haber ido contigo. Tal vez así no... 

-Me hubiese caido igual. No te preocupes-me besó y me abrazó-Voy a arreglarme un poco que estoy horrible 

-Estás preciosa 

-Christian, mi moño se ha deshecho, tengo mechones por todos lados, sin olvidar la brecha que tengo en la ceja 

-Bueno, pues ponte cómoda y túmbate en la cama. Ahora me toca cuidarte yo a ti 

Cuando me arreglé un poco. Hacía mucha calor asi que me puse una camiseta de tirantes azul con unas braguitas a juego. Fui directamente a la cama y me tumbé. La verdad es que me encontraba un poco mal. Estaba mareada y me dolia la cabeza. Mientras me estaba duchando, me di cuenta de que también tenia un par de moratones en las piernas y arañazos en los codos. Debió ser al caerme. Al rato, apareció Christian con una bandeja con comida

-Te he traido esto, para que repongas fuerzas

-Gracias, pero ahora necesito otra cosa

-Toma-me dió una pastilla para el dolor de cabeza

-¿Cómo lo sabias?

-Me lo he imaginado. Ahora descansa un poco, ¿vale?-se sentó a mi lado

-Vale

-Oye, ____, tengo que decirte una cosa-¡ay, madre!-Tengo que irme

-¿A dónde?

-A España-dijo en voz baja pero aún asi le escuché

-¡¿Qué?!-dije incorporándome

-____, túmbate

-¡No puedes hacerme esto! No puedo quedarme sola con tu familia, con tu madre. Me volveria loca. Cogeria un hacha y me la cargaria en plan "El Resplandor"

-Tranquilizate-dijo riendo-Son sólo un par de dias

-Ya... ¿cuánto tiempo son "un par de dias"? ¿El mismo tiempo que cuando dijistes que ibamos a estar aqui un fin de semana y, después, se conviertieron en varias semanas?

-No, esta vez, no. Sólo tres dias

-¿Estás seguro?

-Sí, no te preocupes