El pan ahogado

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- hey ya debes despertarte si no te gustaría llegar tarde a la escuela- amenazó Race en mi sueño

- ¿P-pero el sueño? Esta tan genial no puedo despertarme ahora-

- me vale tu sueño, puedes inventar una final o yo que se sólo levantate ya- afirmó y desapareció quedando una nube blanca.

- Mierda- susurre mientras hacía el intento de olvidar ese sueño tan increíble y volver a la maldita realidad. - solamente debes contar Conny-
-1-
-2-
-3- solté un gran suspiro mientras me a coplaba a la tenue luz que se colaba por un pequeño espacio que había entra la ventana y la persiana.
- espera, eso que escucho es ¿música?- primera pregunta del día que no tardaría en responder yo misma. Me levanté de entre tanta almohadas y colchas, aún mis ojos amenazaba con cerrarse y mi cuerpo con caer de nuevo al paraíso de almohadas y colchas pero Race es más fuerte que todas aquellas tentaciones juntas. Aún investigando de donde salía mi música favorita lleve mi mano a la cabeza, rozando mi oreja sentí una extraña cosa que los humanos llamamos audífonos.
- ¿me quedé dormida escuchando música? -

- ¿ quieres que te responda esa pregunta tonta Conny?-

- No esperaba respuestas pero ya que te ofreciste me puedes decir ¿que Mierda hace estos audífonos en mis oídos? - había cierto sarcasmo en la atmósfera. Me deslize entre las sábanas para quedar colgando en la esquina de la cama y buscar unos monstruos bajo la cama (me refiero a mis dos pantuflas de monstruos ).

Tomé la típica y aburrida rutina de la mañana.
1-. Levantarme sin olvidar mi sueño
2-. Buscar a los monstruos sin olvidar mi sueño
3-. Caminar hasta el armario sin voltear a ver la hermosa y cómoda cama, sin olvidar mi sueño
4-. Elegir una estúpida ropa limpia y terminar poniéndome lo mismo y sucio, sin olvidar mi sueño.
5-. Bajar y "desayunar" como la "buena familia que somos" sin olvidar mi sueño.

Salí de mi cuarto recitando mi sueño una y otra vez, no se me podía olvidar era tan grandioso que tenía que ser contado, escuchado y escrito, para eso tenía que esperar hasta llegar al instituto y tener que esperar a que Ana llegará ( a las 7:30 exactas) y como no me tardaré un segundo en contárselo habría que esperar hasta el descanso (ni con el descanso termino).
Bajo las largas escaleras como un caballo y al final me saltó 2 escalones.

- No hagas tanto ruido niña- me regaño mi madre, tan dulce como siempre deseandome los buenos días con su estilo tan más suculento.

- buenos días para ti también mama- sonreí y la segui con la vista hasta que llegara a la cocina.
No tuve tiempo ni para ver que horas eran. 6:15 -bien, vamos a una buena hora- me tranquilize tomé asiento en la mesa la cual aún estaba sola.

- en unos cuantos minutos vendrá el Gordo y el niño rata- mencioné para mi y Race por supuesto

- cuanto a que el niño rata te insulta primero- apostó

-mmm... apuesto a que primero te insulta a ti - reí sarcástica

- noticia de última hora querida " sólo estoy en tu mente y nadie sabe que estas al borde de la locura"-

- oh si muchas muchas gracias por la magnífica notica- aplaudi y hacia ademanes de agradecimiento

-¿ acaso te has vuelto loca pinche gorda? - pregunto el niño rata desde lo arriba de la escalera con cierta maldad en su cara y también algo de sueño. " te lo dije" resono dentro de mi cabeza seguida de una carcajada de victoria.

- hey antes de que sigas hablando ¿ no crees que sería mejor que te pusieras algo de ropa?, dijo si no quieres dejar ciego a todo el mundo- propuse a mi hermano que de inmediato sacó el "dedo malo" y enseguida le enseñó los dientes mientras que mi boca formaba una enorme sonrisa merecida de ser llamada " sonrisa del gato Cheshire".

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⏰ Última actualización: Dec 24, 2015 ⏰

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