En mil pedazos

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Una noche de pelea... había cristales rotos en mil pedazos por todo el suelo, los intente levantar a pesar de que yo no rompí nada; solo terminaron lastimándome más.
Y así tenía que ser, porque no era yo quien tenía que solucionar lo que no rompí, yo no era responsable del caos que se había hecho aquella noche, lo más fácil era comprar otro vaso de cristal, y no lo pude hacer, porque yo amaba tanto aquel vaso... que no me importaba pegar cada pedazo roto y cortarme las veces que fueran necesarias, solo para no perderlo.

Frases que duelenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora