Una vida.

Humanos

Me quede sentada, en aquella banca. Mirando como desaparecía a lo lejos.

- Heee, disculpa, no queramos provocar un enojo- dijo Chuy

- No te preocupes! después arreglare esto- le dije con una sonrisa

La verdad si estaba preocupada por el problema, pero tampoco podría quitarme mi autoridad como futura alfa, así que debería irse acostumbrando.

- Disculpa, verdad- dijo jorge

- No se preocupen, tranquilos. Ustedes no son de esta zona verdad?- pregunte

- No, apenas se mudaron nuestras familias para este lado- dijo chuy

- Si, y decidimos venir a dar una vuelta- dijo jorge

- Me parece muy bien, pero no les recomiendo que vengan mucho para aca- les comente

- Por que?- preguntaron ambos

- Por que, la gente puede pensar que son personas muy poco agradables, no son muy abiertos a recibir gente nueva, así que para evitar problemas - Les respondí

- Mira Yuritzi, la verdad no nos importa lo que piense la gente de nosotros, pero quizá lo tomemos en cuenta- me respondió Jorge

- Dime Luna, y si yo se que no nos debe importar lo que digan, pero en verdad conosco a la gente de este lugar, muchachos en verdad- les dije

- Luna, no insistas no te are caso! Ademas no me importa, la calle es libre!- me respondio Jorge

- Si, oye Tin, acuérdate que tenemos que volver a casa por unas cosas- dijo chuy

- Jaja Tin, enserio? bueno ya no me burlo!- le dije a jorge, pero no paraba de reir

- No te burles, princesa- me dijo Jorge

- Cállate, no me vuelvas a decir asi- le dije mirándolo a los ojos

Lo mire exactamente a sus ojos  y mire un brillo distinto a todos los demas que habia visto, sus ojos se miraban hermosos con ese brillo bonito. Su olor no era un olor comun, su olor era distinto a el de mis amigos. Sonrio y me aguantaba la mirada, no lo intimide, no mostro inseguridad en ningun momento. El era distinto en todos los sentidos! Fue entonces cuando me imagine que ellos no eran lobos, ellos eran verdaderamente humanos, no llevaban sangre de lobos, ni una sola gota. 

- Que pasa?- pregunto Chuy

- La princesa, se quedo congelada en la nada!- Dijo Jorge

- Solo les les digo que no vuelvan aquí- le dije a ambos

- Vamonos, Chuy... dejemos a esta joven  aquí- dijo Jorge

Se subieron a la moto, sonrieron y solo con la mano se despidieron.

Decidí irme a casa después de todo. Cuando caminaba a casa, seguía pensando en su mirada, en ese brillo, en su sonrisa. El tipo no tenia un gran físico, pero tenia lo suyo! estaba guapo y no podía negarlo, me agradaba verlo. Pero lo que mas me gusto es la forma en que nos comunicamos con esa miraba, parecía que nos gritamos tantas palabras, pero no las escuchábamos. Parecía que teníamos muchas cosas que decirnos pero no sabias que eran esas cosas.

- Donde estabas jovencita?- Grito mi madre al verme apenas llegar a la puerta de la casa, no habia notado que estaba afuera con Valentin y mi padre.

- Para que me preguntas si ya saben donde estaba?- le respondi

- Mira Yuritzi, entiende algo. Te di permiso para ir con Valentin, no para que te vallas con otros tipos!- me dijo mi madre

- Y dime, ya te dijo que me enoje con el? y el por que?- pregunte

- Ya, Yuritzi- Dijo mi padre

- Pues para que me preguntan, si ya vino a contarles el chisme completo!- les dije

Abri la puerta, subi a mi habitacion y cerre la puerta con seguro. No queria saber nada mas de Valentin, ni de nada mas! Solo queria cerrar mis ojos y descansar. Eso fue lo que hice, me acoste en mi cama y cerre los ojos.