The Mistery Bled

Edmund

-Joven Salvatore no se permitirán comportamientos como estos, debe entender que si se le descubre haciendo cualquier otra cosa como esta, es motivo de expulsión -dijo el profesor furioso.

La clase finalizó y todos salieron mientras que Edmund se encontraba en su silla esperando algo. Me detuve a mirarlo y este me miró fijamente.

-¿Qué me ves? -puso cara seria.

-Eh, nada. -me dí la vuelta para salir del aula. Qué grosero para ser de mi especie.

-Sé que eres, y quién eres. -respondió mientras salía.

-¿Qué?.

-Eres una Von Kleist, ¿es obvio no?, eres sangre real de las brujas, eres una bruja blanca o negra?. -me sentí sorprendida de tal chico.

-¿Cómo sabes todo esto?. -pregunté confundida.

-Sólo respónde a mi pregunta. -dijo levantándose.

-Soy una bruja blanca, poseo todos los poderes, soy la hija de Anastasia Von Kleist la reina blanca.

Tal chico se quedó impactado con mi respuesta.

-No deberías dejar que te traten así. -tomó sus cosas y salió.

-Oye espera -tomé su mano la cual estaba hirviendo y este la apartó rápidamente.

-¿Eres uno de nosotros? -pregunté mirando sus claros ojos.

-Sí, soy de fuego, además, heredé un poder de mi padre, puedo controlar a las personas y su mente, puedo matarlas si lo quiero pensar, puedo causar un grave sufrimiento interno. -alzó su mano creando una bola de fuego.

-Genial... -sonreí y este también lo hizo provocando un bello rojo en sus mejillas.

Caminamos hacia el parque el cual estaba solo.

Lo que más me agrada de esta institución es que tiene pinta de misterio y horror. Todo es antigüo pero muy limpio.

- ¿Cómo llegaste aquí? - Edmund preguntó

- Pues, aquí vivía mi papá de pequeño y nos mudamos cerca de la casa en donde vivía. Solo estamos escapando de las personas que quieren encontrarnos. -Respondí-. ¿Y tú?.

-Siempre he vivido aquí, mis padres ya no usan sus poderes, me tuve que dar cuenta yo mismo de que los poseía, cuando les hablé del tema me contaron todo recalcándome que soy uno de los blancos. No entendí un carajo pero no le tomé importancia hasta investigar bien todo. -se acostó bajo un árbol gigante.

Ya acostado Edmund, hice un movimiento con mi mano provocando que el árbol soltara dos manzanas.

-Y....¿te gusta?.

-¿Qué? -preguntó tomando la manzana.

-Ser diferente a los demás. -respondí.

-A veces.

-¿Sabes qué es La Rebelión? -pregunté.

-Un poco, al parecer es un gran grupo junto a la Bruja Negra que quiere exterminar a toda la raza blanca, sólo por venganza.

Se detuvo a mirarme.

-¿Qué? -pregunté con la típica sonrisa pendeja.

-Tienes los ojos de tu madre -

- Hey Charlie - Gritó una voz que reconocía de inmediato

Miré y estaba Hanzell junto a Tobi
-Odio que me llames así- Dije con rabia

-Y a mi me gusta hacerte enojar - Se acercó Hanzell y despeinó mis cabellos.

- ¿Quién carajo es él? No me digas que ya conseguiste un pretendiente - Dijo Tobias celoso