Por Un Día, Solo Un Día.

striper? No, cartero.

Cam clemintong, vivía en una hermosa casa monoambiente que sus padres le regalaron ya que costaba demasiado ir desde su campo al instituto. El famoso instituto Boomsled, increíble por su estructura antiguo por fuera. Por dentro era un sueño, tenia lo último en tecnologia. En fin es igual al instituto de ricos. Lugar donde van los hijos de las personas adineradas que viven en una burbuja, por cierto.
Constaba de 5 pisos extensos llenos de salones de todo tipo, detrás el jardín más hermoso. Llenos de flores silvestres, ah no era el salón de ciencias. Bueno es lo mismo, eso era un jardín, allí Cam amenazaba a sus compañeros que la molestaban tirandole sus útiles a las plantas carnívoras, pero de todos modos eran carnívoras, no se comían nada, los escondía y los vendía.
Muy buena idea para tener dinero.
Tenia el hermano más molesto o mejor dicho, un demonio, Tim. Dos años menor, alto, mujeriego y sexy.
El más vago de la familia, en eso coincidía con su hermana, solo que el amaba el campo y no era fácil sacarlo de allí por ninguna motivo.
Desordenado y mamero.
Iban a diferentes institutos, Tim asistía al más cercano al campo.

Nic Tornerr iba a Boomsled, solo que aún no se conocían.
Vivía con su hermana Li, a tan solo 11 cuadras de Cam.
Juntos con sus dos padres, Fred y Audry, en un casa de dos pisos con ladrillos vistos.
El tenia muchos amigos con los que contar, Zequi, Fran, Niki, Roge, Luk.
Pero Nic a diferencia de su hermana era bastante independiente.
Y eso fue exactamente lo que lo llevo a conocer a cam.

Nic's Pov
Me vestí con la mejor ropa, una camisa un Jean oscuro, mis zapatos nuevos, la corbata azul que mi padre me presto, me peine como siempre, todo mi pelo revuelto, me puse el mejor perfume con la que conquistó a las chicas por las dudas que la gerente sea una bella dama y salí a la ciudad, donde había visto el cartel de "se busca empleado con buen fisico"

Al pasar y ver eso no quise saber más, iba a cumplir mi sueño de ser striper y ganar mucho dinero. Así que ahí fui, directo a ese edificio lo que me parecía raro que sea una agencia de stripers, pero todo podía ser.

-Buenos días, señor? En que puedo ayudarlo?

-Hola buenos días, vengo a entregar mi curriculum. Se que están buscando nuevos empleados y quería probar un poco de suerte, aunque ya tengo suficiente al ver su hermoso rostro arrugado de una dama. Pero bello como una rosa marchita.

-oh muchas grac... pero que dijo usted? Como se atreve a llamarme rosa marchita, con todas las cremas que uso por día, el sueldo se me va en productos de baba de caracol, gusanos babosos y pis de...

-bueno, ya ya suficiente información. Puedo pasar?

-si, el señor lo está esperando. Hay unos 25 postulantes más, tendrá que ser lo suficientemente bueno como trabajador y no un chamuyicidio como recién.

-Gracias.-Hace una sonrisa de ganador.

-De nada.-Se sonroja, y las arrugas se notan más.

Que tarado, no pregunte por donde debía ir. Caminaba por un pasillo con 1 puerta al costado cada 1 metros más o menos, todas cerradas. Así que me asomaba por la cerradura para ver si había movimiento.

Era la puerta número 5 cuando me asome y vio todo negro, me llamo la atención ya que era la última puerta volví a mirar pero perdí el equilibrio y mi frente golpeó la puerta en un estruendo que rebotó y relleno cada esquína del lugar, solo rezaba para no haber metido la pata, luego de unos segundos suspire al no escuchar ninguna puerta abrirse, comencé a levantarme lentamente apoyando todo mi peso sobre la puerta y de golpe, vi todo de negro. Otra vez.

Sentía un gran dolor en mi cabeza y en mi dedo meñique, abrí los ojos muy despacio y vi una gran sombra negra, cerré de nuevo los ojos y los volví a abrir ya se iba aclarando. Cuando mi vista se aclaro completamente pude ver un gran hombre robusto con un chaleco de cuero y tatuajes en sus brazos, pelado y una barba voluminosa, del susto quise levantarme pero solo volví a ver negro de nuevo. Por tercera vez en el día, y mi color favorito era el verde.