El crepúsculo de hoy se me escapó,
Mientras la noche velozmente acechaba.
Y tu triste recuerdo pude ver,
En los inciertos espejos de la ilusión.
Te conocí una tarde de esas de abril,
Que la memoria decide que no valen la pena.
Te rostro se tatuó en mi mente,
Como aquella cicatriz que por la vida nos sigue.
Recuerdo tu sonrisa que venía como el café de las mañanas,
Y la resonancia poética de tu nombre, imposible de no notar.
Tu belleza como el filo de una navaja,
Y la tristeza de mis ojos que bien conoces ya.
Hoy ya no estas aquí, te marchaste,
Te has ido, dejándome aquí más solo que nunca.
Pero que difícil es no sonreír al recordarte,
A ti, y a tu mirada asesina.
Por siempre tendremos las historias, mi amor,
Aquel poema, una película y tu indiferencia.
Como una fotografía queda impreso tu recuerdo,
Y yo con mis invisibles lagrimas te digo adiós.
ESTÁS LEYENDO
Poemas de una pura alma maldita
PoetryUn poema es más que rimas o palabras bien sonantes, un poema es más que una simple métrica o algo que se hace por pura diversión. Un poema es una historia, una lágrima derramada llena de recuerdos, un sentimiento que el cuerpo no pudo contener más...