Gamer|| Larry Stylinson|| Smut || O.S

1.

Louis había llegado de hacer las compras semanales, pensaba darle una buena cena al rizado, bueno si este se dignaba a comer.

A Louis empezaba a frustrarle el hecho de que su novio se pasaba horas sentado en el televisor jugando con su Xbox y no le prestaba nada de atención y cuando digo nada, en serio es nada, quería contarle lo que le pasaba en el día  y en su trabajo sin embargo cuando hablaba pareciera que estuviera hablando sólo ni una mirada ni algún gesto que indicara que su novio lo estaba escuchando, a Louis ya no le gustaba eso, se sentía muy triste. A veces pensaba que Harry le gustaba estar más con esa máquina que con él. Era algo estúpido, pero en realidad le afectaba demasiado y no podía dejar de pensar en eso, solamente se la pasaba viendo a su rizado desde la cocina, como él maldecia y decía cosas sin sentido.

Cuando entró al departamento ¡Oh, vaya sorpresa!, seguía ahí jugando como que si nada, dio un gran suspiro y se dirigió hacia el comedor para poner las bolsas de compras.

"Cariño ya llegue" dijo Louis sin muchos ánimos, claro Harry ni lo volteo a ver.

Harry estaba pasando sus límites, en verdad le afectaba que no le hiciera caso, que no lo besara por más de dos semanas, que ni siquiera lo volteara a ver en el día, que no llegara a dormir a la habitación ya que se quedaba dormido en el sillón y que por más dos meses desde que compró esa cosa, no lo tocara ni lo mirara con deseo, él necesitaba que Harry lo follara duro en la cama o en cualquier lugar a este punto no importa en donde fuera, pero lo necesitaba ya. De verdad esto lo estaba matando y si Harry seguía así tendría que marcharse por un tiempo, sólo temía que Harry ni se diera cuenta que él ya no estaba.

Con esos pensamientos y con los ojos llorosos sacó las cosas para preparar la cena.

*****

"Amor, la cena ya está, ven a comer" dijo Louis poniéndose al lado del sillón donde se encontraba Harry sentado con algo de esperanza de que tal vez hoy sí lo escuchara.

"¡Muere maldita perra!" gritó el rizado al matar a su enemigo, claro no le había hecho caso. Esto era suficiente.

Louis se dirigió hacia la cocina y sirvió un poco de pasta para él ya que no pensaba servirle al rizado después de haberlo ignorado de esa manera. Término su comida y se levantó para llevar el plato al lavabo.

Se iba a meter a su habitación si no antes de mirar por última vez su novio que seguía ahí sentado con la mirada fija en el televisor. Sus ojos se aguaron al instante y no pudo evitar llorar, Harry lo había dejado de querer...

"Harry" dijo con la voz entrecortada.

"Hmmmm" dijo sin prestarle mucha atención, bueno al menos le había contestado eso ya era un gran avance.

"¿No vas a venir a dormir a la habitación? Te extraño..." dijo secándose un poco las lágrimas con su sudadera que le quedaba admirablemente grande.

"No ves que estoy ocupado Louis, no tengo tiempo para tus cosas" Auch.

Louis se soltó a llorar en ese mismo instante tapándose con las manos su rostro, se apoyo en la pared para que así no cayera, se deslizó por la pared hasta llegar al suelo quedándose tirado con las rodillas en su pecho.

Harry escuchó los pequeños sollozos de Louis y levantó su mirada viendo a un Louis completamente destrozado en el suelo. Mierda...

Se levantó del sofá de inmediato sin importar que lo mataran en la partida que estaba jugando. Se agachó y tocó la cabeza de castaño que no había dejado de llorar.

"Lou-u" dijo tartamudeando.

Louis paro de llorar y hubo un silencio incómodo entre los dos.

"Louis amor, ¿estás bien?" dijo el rizado tratando que Louis levantara la cabeza para que pudiera verlo a los ojos.

"No Harry, no lo estoy. Pero eso a ti no te importa" susurro volviendo a sollozar.

"Claro que me importa mi amor, lo que te pase claro que me importa" dijo el rizado también en un hilo de voz, le mataba ver a su pequeño así.

"No mientas ahora Harry" dijo Louis separándose de rizado para irse a su habitación y poder llorar por fin.

Harry lo tomó del brazo apretando su agarre para que Louis no escapara.

"¡No quiero que me toques!" dijo el castaño levantando un poco la voz. Comenzó a moverse y tratar de zafarse del agarre del rizado cosa que no consiguió.

"En este mismo momento me dices qué mierda te pasa"  el asunto le empezaba a molestar al rizado.

Louis lo vio directamente a los ojos era hora de sacar todo lo que llevaba dentro ya hace varios meses.

"¿Qué mierda te pasa a ti Harry?" dijo mientras sentía que sus ojos volvían a llenarse de lágrimas "¿Dónde mierda está el novio que yo amo? Porque el que tengo aquí enfrente no lo es. ¿Donde está el Harry que no paraba de besarme y abrazarme? que no podía parar de tocarme" el rizado bajo la mirada. Ya sabía a lo que se refería "No me has besado por más de dos semanas, desde que compraste esa mierda, apenas me miras Harry" para ese momento Louis ya estaba llorando como magdalena "Harry, no me has tocado por más de dos meses, con suerte logro que me contestes o me mires. ¿Sabes lo mierda que se siente que te ignoren todos los putos días?, ¿qué cuando cuentes como te fue en tu día no te hagan caso? Pues es lo más mierda que la persona que amas te haga eso" dijo eso último bajando su mirada, cada cosa que decía le partía en pedazos. El rizado había bajado su mirada para que Louis no pudiera verlo llorar o no ver llorar a Louis que lo destrozaba aún más.

Se quedaron en silencio y lo único que se escuchaba eran sus respiraciones entre cortadas y algo agitadas.

"Me voy a dormir Harry, puedes seguir jugando" dijo en un hilo de voz para empezar a avanzar hacia la habitación. En verdad no quería ver llorar a Harry, sabía que no podría resistirse las ganas de abrazarlo y decirle que todo estaba bien, porque ambos se necesitaban demasiado.

"No Lou" el rizado lo tomó de la cintura poniendo su cabeza en la frente de Louis.

"Perdóname mi amor, de verdad no estaba consciente de lo que pasaba a mi alrededor" sus lágrimas caían por sus mejillas "No sabía el daño que te estaba haciendo Lou, perdóname por no hacerte caso amor, no sabes lo mucho que te necesito y me duele tanto que estés así por mi maldita culpa. No sabes lo mierda que me siento por hacer llorar a la persona que más amo en este mundo" dijo mientras limpiaba las lágrimas de Louis que no habían parado de caer desde que empezó a hablar.

Louis no podía ver a su bebé de esa forma lo partía en pedazos verlo llorar de esa manera, se acercó a el mientras pasaba sus manos por encima del cuello de rizado cortando el espacio que les quedaba, le dio un abrazo que ambos necesitaban.

Y ambos sintieron que su corazón volvía a latir.