Fue como si una Bomba estallara en un edificio lleno de gente, como si se derrumbaran los pilares principales y cayera piso por piso desintegrándose en segundos. Así de fuerte fue abrir los ojos a la realidad.
Cuando mis sentimientos por ti eran tanto que superaban los sentimientos por cualquier otra persona, tu opinión valía más que la de todos y tú ocupabas el centro del universo y también eras el universo en sí. Creía que todo estaba bien pero me doy cuenta de todas las veces que intentaron decirme que corriera tan rápido como pudiera, debí hacerles caso a tiempo. Pero ya no puedo hacer nada.
Te amé, ya no estoy segura de sí era amor, pero es lo que yo consideraba amor al menos; es solo que tenía sabor amargo y un tope de egoísmo. Yo realmente intentaba ser perfecta para ti, ser considerada, ser alguien a quien quisieras presumir; pero yo nunca te impresionaba, tú nunca valoraste mis esfuerzos.
Una vez leí que no podías amar si no estabas seguro de que también te amaban, de que tú también inspirabas amor. Creo que esta frase debería ser tan cierta como que las nubes no son más que agua en un estado distinto de su ciclo.
Entonces ahora que la bomba ha estallado, que el edificio ha caído, que se han detectado los números de muertos totales o aproximados, puedo evaluar el Porqué de la situación.
Tal vez hayan limites, y digo "tal vez" aunque estoy segura de ello; deben haber limites en el amor, algún contrato, algún pedazo de hoja de un cuaderno antiguo. Digo que ambos cruzamos limites; tú me heriste de una manera tan absoluta que ahora me es imposible pensar que me quisiste; siempre estuviste tu por encima de todo, siempre eras tú por encima de mí. Siempre yo aspirando a tu lado nada más que tus metas, nada más que tu compañía... ahora me doy cuenta de lo vacío que se sentía.
Nunca es demasiado tarde para empezar de nuevo, creo que debiste marcharte antes pero sé, que quien en realidad nunca debió quedarse fui yo... sé que aprendí lecciones importantes, yo no sería quien soy ahora sin ti; por alguna razón ahora sé que tristemente tú en cambio, nunca aprendiste la lección.
Quisiera pensar que terminamos en buenos términos, que esta vez te creo igual que toda las veces anteriores, que volvimos y somos felices porque "tu cambiaste" o que simplemente nada volverá a ser igual pero que tú lo entiendes y somos buenos amigos. Pero adivina, no es así. Derrumbaste nuestro edificio, colocando bombas y cuando la última de ellas estalló, no quedo más que dolor, gritos, estruendo y luego....desolación.
Te amé tanto hasta pensar que ya no existía, ahora sé que esta es la manera más absurda de amar. Te di todo de mí hasta que ya no me quedó nada y no recibí nada a cambio...
Quisiera decir que aún queda algo de ese amor y que en el fondo sé que si vuelves yo voy a estar aquí esperándote, pero no puedo darte esa noticia... porque no es verdad. Esto es lo que pasa con los amores malos; se extinguen en su propio fuego y no renacen más.... no son como el fénix, solo perecen.
Y ya no te amo, ni siquiera lo dudo.... Incluso me pregunto si te odio, solo porque no te mereces que gaste ni un poco de mis energías odiándote.
Aun me cuesta creer que una persona pueda hacer tanto daño a sangre fría, no puedo creer que creas que tienes la razón después de todo.
Acabando con el asunto quiero que sepas que este es el final definitivo, espero fervientemente que no haya rastro de ti en ningún lugar y que sepas que de todos nuestros finales....este es el único que he deseado de verdad.
Unas ultimas gracias, ya no seré tuya pues soy mía; respiro profundo después del desastre pues ahora soy la eterna desconocida...Finalmente curada
