Ahora vivo con él. Con el hombre de mi vida. Con mi hombre. Sólo mío.
Mi Atzin.
Veo su rostro cada mañana mientras me preparo para ir a trabajar. Y toco su mano sin que la quite, puedo acariciar su cabello mientras vemos la televisión los fines de semana, puedo olerle el cuello sin que empiece a temblar de miedo.
Se curó.
Él me curó.Queremos adoptar un niño o una niña dentro de muy poco y creo que no puedo estar más feliz.
También creo que todo se puede sanar. O sanear. Depende mucho de cuán podrido estás por dentro.
Pero se puede.
No tengas miedo de sentir algo por alguien.
Porque después de todo, no te enamoras del género. Te enamoras de la persona.
-Tate.
Agradecimientos:
Vale, esta historia no tiene mucho lío porque la creé de pura flojera.
Quiero agradeceros por todo lo que habéis hecho en estos últimos meses. Quien iba a creer que esta historia tendría tantas leídas.
Sois grandes. De verdad. De verdad que son hermosos y celestiales.
Ah, y otra cosita.
Por si quieren más escritos pueden pasar a mi otra cuenta: llenadesol en donde estaré más activa que aquí y podrán deleitarse con escritos más actualizados.
Otra vez, gracias.
Adiós.
♡
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mil y una lágrimas
Short Story¿Cuántas lágrimas puede derramar un chico? ©Obra registrada en Safe Creative. No copieis, sed originales.