-Wow. Cuida tu boca enana. Al parecer no sabes con quien estás hablando.- dijo muy serio.
No. No dijo eso. El muy maldito no dijo eso. Está muerto.
Nadie me dice enana. Ni aunque lo fuera. Nadie, ni siquiera mis hermanos, están autorizados. No me gusta. Lo odio.
Luego de que esas palabras salieran de su boca, me paré inmediatamente enfrentándolo.
-Se muy bien quien eres.- achiné los ojos mientras me acercaba a él.
Abrió levemente su boca para decir algo más, pero fue interrumpido por la voz de el Profesor Benson.
-Buenos dias alumnos , disculpen mi tardanza.- salvada por la campana.- Joven Rickman, por favor vuelva a su lugar. - me dió una última mirada antes de dirigirse a su respectivo lugar.
La clase transcurría normal... sentía miradas de Rickman de vez en cuando.
Mientras atendía al profesor, en mi mesa calló un pequeño avión de papel.
Lo desdoblé y una bella caligrafía apareció impresa en él:"Muy mal de tu parte lo que hiciste hace un rato... Ten mucho cuidado, zorrita.
- R.M. 💜"
Leí una y otra vez la pequeña nota que tenía entre mis manos. No comprendí bien el mensaje.
Me volteé para ver quien había sido el emisor de la nota. Para mi sorpresa la nota era de Rebbeca McGuire. La puta de la escuela. No puedo mentir, la zorrita era muy hermosa, peeero lamentablemente su belleza no supera su idiotez. A la pobre le falta cerebro. Se acuesta con cualquier chico nerd con tal de conseguir la tarea. Y con cualquier chico me refiero a cualquier chico, ya sea jodidamente sexy o horriblemente feo. Hasta han dicho que una vez se acostó con el profesor de Literatura.
Noté rápidamente que era suya la nota por la mirada de estúpida que tenía. Parecía una vaca estreñida.
Lo único que pude hacer ante su intento de intimidación fue reírme como una foca retrasada. Lo sé, muy original, pero su cara era épica. Estuve a punto de sacar mi móvil para tomarle una foto cuando el profesor me interrumpió.- Señorita Emerson. ¿Tiene usted algo que compartir con la clase? - me preguntó mientras alzaba una ceja.
- Mmm, no lo creo profesor. - le sonreí inocente.
- Muy bien, tendré que repetir las instrucciones del trabajo final ya que usted no me dejó terminar gracias a su peculiar risa.- cruzó sus brazos.- Si es que así se le puede llamar. - dijo por lo bajo.
- A ese tipo de "risa" se le llama Risa de Foca Retrasada, Profesor Benson.-interrumpió la zorra haciendo comillas con sus dedos mientras todos reían.
- Y para los que no sabían, a ese tipo de rostro, si es que así se le puede llamar, se le llama Rostro de Zorra Necesitada.- dije con una sonrisa en mi rostro provocando que todos mis compañeros se rieran de nuevo.
La zorra me volvió a mirar como una vaca. Se veía taaaan graciosa.
-Señorita McGuire- dijo mirando a Rebbeca- Señorita Emerson- dijo ahora mirándome.- Las quiero fuera de mi salón en este instante. - dijo ahora señalando la puerta.
Recogí mis cosas rápidamente dispuesta a salir de allí.
Cuando salí de el aula, la zorra me pasó por al lado dandome un fuerte empujón. Luego de eso caí al suelo recibiendo un golpe en la cabeza. El golpe me habia provocado un leve mareo.