Krampus. La leyenda renace.

La lucha final.

Era ya de noche. Habíamos terminado la comida de Navidad y le dije a mi madre si podía quedarse Paul a merendar. Su madre le dejo quedarse también a dormir.
Subimos a mi habitación y allí planeamos como derrotar a Krampus.
A las 2 de la mañana sonó mi despertador y de repente Paul despertó diciendo:"¡¡Lo noto!! Está ahí fuera."
Cojimos lo que me dio mi abuela y fuimos al salón. Escuchamos los sonidos de unas cadenas que venían hacia la casa. Y también oí que el monstruo se posó en el tejado. Paul se puso el collar y recité un conjuro de un libro también de mi abuela. Salimos y empezó a dar en el suelo con un palo mientras que cantaba una canción que, supuestamente, mataba a los súbditos de Krampus.
Y así fué. Él empezó a mandar a sus demonios a que atacaran a Paul, pero esas ondas los mataban.
Paul empezó a caminar hacia el monstruo. Poco a poco, se acercaba a la casa y empezaba a subirla mientras Krampus no se daba cuenta. Pero no todo es de color de rosas. El bicho lanzo un carga hacia Paul que lo aturdió. Estaba tirado en el suelo, sollozando. El cielo se turbio y solo se oia la risa malévola del demonio. Me acerqué a mi amigo, sin parar de recitar el conjuro de la abuela. Dibuje un circulo con las tizas. Despues dibuje otro y otro y otro hasta hacer el dibujo que aparecía en el libro. Esto podría proteger a Paul mientras que derrotaba a Krampus. Él saltó del tejado, y seguía llamando a sus malvados discípulos. Me puse el collar de Paul y recité otro conjuro. Los huesecillos empezaron a agitarse y se elevaban hacia el cielo y de repente... ¡¡Lanzarón un rayo de luz azul hacia el monstruo!!. Miré hacia atrás y vi a Pual levantándose del suelo, dentro de una gran bola de energía azul. Se elevaba poco a poco, el pecho se le levantaba.
De repente se oyó un grito gutural, y Paul y yo nos despertamos en mi habitación.
Cuando se despertó, Paul saltaba y reía y cantaba villancicos.
Ese día recordaré que Paul ya le gustaba la Navidad.

¡¡ F E L I Z N A V I D A D !!