❋019❋

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Era sábado, dulce y glorioso sábado que tardó años en llegar, ó al menos así lo sentía Tae.

El día de ayer, después de la extremada paliza que se había ganado por parte del pelinegro, no volvió a hablarle, es más, lo ignoró por completo.

Cuando bajó en ropa interior, vagando por los pasillos hasta llegar a la cocina, el timbre sonó ruidosamente.

Giró sobre sus pies y en vez de dirigirse a la cocina fue hacia la puerta, sin darse cuenta que simplemente se encontraba en su ropa interior.

Y en cuanto abrió se encontró con el pelinegro de ojos oscuros, quien cortamente lo recorrió con la mirada y en cuanto lo visualizó mordió su labio inferior.

Habían algunos moretones no muy notables que comenzaban a marcarse en el cuerpo del chico algo pálido.

"Vine a disculparme" Susurró, observándolo.

Taehyung se encogió de hombros, se sentía sumamente mal, por verlo a él así, por ver que le pegó y simplemente por sentirse un completo idiota por seguir estando enamorado de él y no haberse ido corriendo cuando se lo advirtió, pero por un lado no lo creyó posible.

"Te hice daño y entiendo si deseas odiarme" Entró a su casa, cerrando la puerta de entrada a sus espaldas "Jimin me había llamado y básicamente balbuceó miles de palabras hirientes" Su voz comenzaba a romperse y Tae no pudo evitar sentir una punzada de dolor "No debí haber desquitado mi dolor golpeándote" Sollozó, mientras sus oscuros ojos comenzaban a aguarse.

Taehyung se quedó en silencio, sin saber qué decir.

Kook tomó de las mejillas el frío rostro de Tae, acariciándoselas con cierta dulzura, mientras lágrimas comenzaban a caer de su rostro.

Y finalmente se acercó, rompiendo el corto espacio que había entre ellos, plantando sus labios contra los de él, haciendo suaves movimientos.

madness | vkook | adaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora