01/01/16
Me hubieras acabado, con un poco mas de desinterés y menos moral, te aseguro que lo hubieras logrado. Pero quizá fueron mis propios actos los que te llevaron a ello, porque lo admito, puede que yo halla forzado un poco nuestro destino, en especial con la vez que te hable sobre lo que sentía y lo que creía que tu sentías también, y lo dude, me sentía insegura por que me vieras con brackets, pero dijiste que me quedaban lindos y mi segunda preocupación fue en quedar como una desesperada, si lo estaba, no podía seguir fingiendo mas que no le ponía asunto a lo que pasaba o pasaría si nos manteníamos en intriga por mas tiempo, estaba desesperada por asegurar a mi nombre tus miradas, tus sonrisas y tus abrazos, pero no es la mejor opción que una enamorada quiera relucir, si, todo, menos la desesperación.
Esa vez que hablamos fue diferente, tu rostro lucia admirado y apagado, a comparación de todas las veces que tratábamos de tener una conversación, con tus ojos brillantes e inquietos, y supongo que yo parecía confundida y al abismo de cualquier decisión que tomarás.
Debí de haber tenido miles de señales para dejar de depender de ese mismo momento, de ti, pero solo veía lo que quería y solo escuchaba lo que quería escuchar. Y a resultado de todo hasta el día de hoy, supongo que tu dijiste y pensaste lo contrario a lo que querías para ti, y si, fue para tu conveniencia por un tiempo. Como no ser lo con alguien como yo?
Pero al parecer, no lo fui lo suficiente.
Y quien diría que después de tantos intentos que dio el chico mas alagado del colegio, termino siendo un paso de un mes y medio que no llega a la altura de nuestros mismos casi 4 años impregnados en confusos e ilusos enamorados;
Y eso viene siendo el resumen de mi primer corazón roto;
Lo que sucede en respuesta a eso queda a imaginación propia, o mayormente a la sensación de estar identificado con el daño colateral de un amor errado.
