MARSHA Y EL MUNDO

Capitulo 3

A la mañana siguiente cuando me desperté vi a mi madre en mi habitación buscando algo en mi mochila de la universidad, resulta que yo en esa mochila tenia las notas de algún examen suspendido que no le había enseñado ni dicho nada a mi madre. Me levanto de la cama como si fuese un león y cojo la mochila rápidamente. Mi madre me pregunta :

- Que llevas en esa mochila para que te pongas así, como si llevaras oro- Me dice mi madre asustada

- No solo que...bueno que... no me gusta que me vean la mochila sin mi permiso- Le contesto a mi madre con una sonrisa falsa.

- Bueno me voy a preparar el desayuno- Me contesta mi madre con una cara de medio enfadada , de medio intrigada y sorprendida.

Ufffffffffff menos mal que me he despertado a tiempo, mi madre no ha visto los exámenes no me lo quiero ni imaginar como se puede poner mi madre al ver los exámenes de treses o como mucho cuatros. Al final decido sacar los exámenes y guardarlos en la estantería de mi cuarto que está llenos de libros, así ya no podrá ver los exámenes suspendidos y no tendré  que estar preocupada de que mi madre me vea la mochila.

Voy corriendo por el pasillo a desayunar para que mi madre no sospechara más, y adivina que me encuentro en la mesa de la cocina, unas fresas con chocolate y leche con cereales, ummmmmmm... es mi desayuno favorito.

 Pero porque mi madre me a querido preparar este desayuno?

No lo entiendo, me tendrá que decir algo triste o que van a empezar las clases de la universidad antes, tengo que empezar a estudias para el próximo curso... muchas cosas no me lo quiero ni imaginar.

Me siento en la mesa y antes de empezar a desayunar le dido a mi madre:

-¿ Que a pasado mama ?- Le pregunto sudorosamente.

- Pues veras... que... bueno a ver... tu abuela se ha tropezado con el escalón de un restaurante, y se ha roto un peromé. El peromé es un hueso que está en la pierna al lado de la arteria.

Yo me he quedado sorprendida y asustada, he querido ir rápidamente al hospital para ver a mi abuela llamada Julia. No me han dejado ir a visitarla porque todavía le estaban haciendo muchas pruebas, y también se tenia que recuperar del susto y del golpe que se había dado.

Yo me voy corriendo a mi cuarto porque no quería entristecer a mi madre aun mas, cierro la puerta de un golpe y me tiro a la cama,  me pondo ha llorar.

Mi madre toco la puerta de mi habitación, yo no quería que mi madre me viese llorar pero no podía aguantarme las lagrimas.

- Tranquila Marsha tu abuela se va a poner mejor, mañana a la tarde iremos ha visitarla-Me contesta mi madre, con una sonrisita para intentar animarme. Yo le contesto:

- Si pero... ¿le van a operar?- Contesto muy asustada.

- Si le van ha operar, pero no tiene ningún riesgo. Tu estate muy tranquila- Me contesta mi madre.

- Pero... ¿ Cuando le van a operar? - Contesto.

- Le operaran mañana a la mañana. Sobre las diez- Me contesta mi madre, un poco preocupada.

Mi madre se va de mi cuarto, me que de asustada y con ganas de que llegase mañana para poder ver a mi abuela.

Espero que la operación salga bien y no halla ningun accidente.