La manera en la que me hacía sentir...
Era confusa, a veces como el cielo y otras como el infierno.
No sólo dependía de quien estaba alrededor, si no mas bien de su estado de ánimo; si el estaba mal, entonces yo estaba mal, si el estaba bien, entonces todo estaría bien.Me frustraba su manera de ser, y la manera en que me hacía sentir.
Me tenia confundida, con la cabeza hecha un desastre y con el corazón patas para arriba.No sentía que el me pertenecía, ni tampoco me sentía suya.
Pero teníamos algo.
Algo de lo que ninguno de los dos estaba seguro.