Girl Online (castellano)

✨ Capítulo 2 (parte 2) ✨

Oigo las pisada de Elliot subiendo a toda prisa por las escaleras, y la puerta se abre de par en par.

-¡Lady Penélope! -exclama. Lleva un traje de raya diplomática vintage, unos tirantes y unas Converse de color rojo chillón: es lo que él entiende por un modelo de estar por casa.

-¡Lord Elliot! -exclamó yo. (La semana pasada, Elliot y yo nos dedicamos casi todo el fin de semana a ver un DVD tras otro de Downton Abbey.)

Elliot de me queda mirando fijamente tras sus gafas negras de pasta.

-Vale, ¿qué ha pasado?

Sacudo la cabeza y me echo a reír. A veces juraría que es capaz de leerme el pensamiento.

-¿Por qué lo dices?

-Estas muy pálida. Y llevas ese horror de pijama que solo te pones cuando estás deprimida. O cuando tienes deberes de física.

-Que viene a ser lo mismo -me río y me siento en la cama.

Elliot se sienta a mi lado con aspecto preocupado.

-Me ha...me ha dado otro ataque de pánico.

Elliot tiende su delgado brazo sobre mis hombros.

-¡Qué me dices! ¿Cuándo?

-En el JB's

Elliot resopla con sorna.

-Ja, no me extraña. ¡La decoración de ese sitio es espantosa! Bueno, ahora en serio, ¿qué ha pasado?

Se lo explico, cada vez más avergonzada. De pronto suena todo tan trivial y tan tonto...

-No se por qué te juntas con Megan y Ollie -dice Elliot cuando pongo punto final a mi trágico relato.

-Tampoco son tan mala gente -respondí sin demasiado convencimiento- El problema está en mi ¿Por qué me entran esos agobios últimamente? Porque, vaya, la primera vez todavía era comprensible, pero lo de hoy...

Elliot ladea la cabeza, como suele hacer cuando está reflexionando.

-Quizá te irá bien contarlo en el blog.

Elliot es la única persona que sabe que existe mi blog. Lo sabes desde el primer momento; primero, porque confío totalmente en él, y segundo, porque es la única persona con la que puedo ser yo misma y no hay nada de lo que pueda publicar en ese blog que él no sepa.

-¿Tú crees? -digo, arqueando la ceja- ¿No te parece un poco fuerte?

-Qué va -contesta Elliot- Quizá escribiéndolo te sientas mejor. Puede que te ayude a comprenderlo. Y, quién sabe..., puede que alguna de tus seguidoras haya tenido alguna experiencia similar. ¿Te acuerdas cuando contadte lo de tu torpeza?

Asiento con un ademán. Hará unos seis meses explique en el blog que me había caído de cabeza en un contenedor y pase de 202 seguidores a casi mil en menos de una semana. Nunca había tenido un éxito así. Ni me habían dejado tantos comentarios. Está claro que no soy la única adolescente patosa de nacimiento.

-Puede que tengas razón...

Elliot me mira sonriendo.

-Lady Penélope, tengo razón.

15 de diciembre

¡¡¡Socorro!!!

¡Hola a todos!

Muchas gracias por todos vuestros amables comentarios sobre las fotos que colgué de Snooper's Paradise: me alegro de que disfrutarais con su extravagancia retro tanto como yo.

El artículo de esta semana no es nada fácil de redactar, porque trata sobre algo muy duro que me ha ocurrido, bueno, que me está ocurriendo. Cuando abrí este blog, me propuse ser totalmente sincera, pero entonces no podía imaginar que Girl Online despegaría de la forma en que lo ha hecho. No me puedo creer que ya tenga 5432 seguidores, ¡muchísimas gracias! La idea de abrirme a todos vosotros y contaros lo que os voy a contar me da muchísimo miedo, pero Wiki opina que quizá me haga sentir mejor, así que allá voy.

Hace tiempo, tuve un accidente de coche. No os preocupéis, no hubo víctima ni nada. Aun así, fue una de las peores experiencias de mi vida.

Mis padres y yo volvíamos a casa, y hacia una noche de esas en que parece que la lluvia se te viene encima como una marea. Mi padre había puesto el limpiaparabrisas a toda velocidad, pero ni por esas. Era como atravesar un tsunami. Acabábamos de coger la autoría cuando de repente un coche se nos cruzó por delante. No sé muy bien que pasó después (creo que mi padre intentó frenar para esquivar el golpe), pero había tanta agua en la carretera, y el suelo estaba tan resbaladizo que el coche fue patinando hasta la mediana, ¡y dimos una vuelta de campana!

No se vosotros, pero yo eso solo lo había visto en las películas. Y en las películas, cuando cuando un coche vuelca, suele estrellar en pedazos o un camión se le empotra por detrás o cosas por el estilo, así que yo lo único que pensaba era:《Vamos a morir》. No dejaba de llamar a mis padres a voces, porque no sabía si les había pasado algo, y ellos a mí, pero no podía moverme. Me había quedado atrapada, yo sola, boca abajo, en la parte traerá del coche.

Por suerte, no nos matamos. Un señor muy agradable que lo había presenciado todo aparecí en el arcén y vino a socorrernos. Y luego, cuando llegaron los del servicio de emergencia , también fueron muy amables. Nos llevaron a cabo en un coche patrulla y nos pasamos toda la noche en vela los tres, sentados en el sofá arrebujados en los edredones, tomando té cargado de azúcar hasta que amaneció. Ahora ya ha vuelto todo más o menos a la normalidad. Mis padres apenas mencionan el accidente y tenemos un flamante coche nuevo en el garaje. Todo el mundo me dice:《Suerte tienes de qué no te pasará nada》. Y es cierto, fue una suerte. Pero la verdad es que, aunque por fuera no tengo ni una herida no un morado como consecuencia del accidente, por dentro siento como sí se me hubiera roto algo.

Ni siquiera sé si esto puede ser consecuencia de un accidente así, pero desde hace un tiempo sufro unos ataques muy raros, como de pánico. Si me agobio por algo y me da la impresión de que no tengo salida, vuelvo a sentirme como la noche en la que me quede atrapada en el coche. De repente me entra como un calor, me tiembla todo el cuerpo y me cuesta respirar. Ya es la tercera vez que me pasa, así que tengo mucho miedo de que se repita. Y no de qué hacer.

Espero que no os parezca mal que os cuente todo esto. Prometo que la semana que viene seré otra vez la de siempre. ¡Y os traeré montones de fotos de las deliciosas chocolatinas de Choccywoccydoodah! Pero si alguno de vosotros ha pasado por algo parecido a lo que os acabo de describir y tiene alguna idea de cómo evitarlo, dejadme un comentario más abajo, porfa. Bastante tengo con ser《La persona más patosa del universo》, ¡para encima ser la más miedosa también!

¡Gracias!

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