El rapto

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Bueno, lo primero es dar las gracias por los setenta leidos, se que no es mucho pero a mi me pone muy contento.
Gracias por leerme y sobre todo por votar.

-¡Mierda! -Dijo Sofia. -Se me había olvidado que tengo que ir a buscar a mi hermana, hasta otro día.
Salió corriendo a gran velocidad, que gracioso se me hace verla correr con tacones.
Sin darnos cuenta se nos habían hecho las dos y media. Asi que decimos marcharnos todos. Ya saliendo por la puerta las digo -si alguien sabe algo de Lucía porfavor que me avise.
Las chicas asintieron con la cabeza. Carla se fuero junta por la calle principal mientras que Natalia se metio por una callejuela estrecha, decidí seguirla. Ella giró una esquina pero decidí quedarme quieto, los mas pegado a la pared posible. Aun así, podía verla gracias al retrovisor de un coche. Estaba caminando a gran velocidad por lo que no tardó en desaparecer del ángulo que me proporcionaba el espejo. Asomé la cabeza y ella estaba alli frenté al portal número dicisiete, llamando a un timbre. La puerta se abrio rapidamente y de ella sasomaba una caja de madera sujeta por unas enormes manos. Derrepente Natalia se giró hacia mi con una profunda y deasiante mirada. Me quedé tan asustado que no podía moverme. Un par de segundos mas tarde comenzó a caminar hacia mi. Al instante recobré el sentido y eché a correr de vuelta a la calle principal. Una vez allí ya me sentía mucho mas seguro. La verdad no se porqué me asusté, pero lo hice. Al llegar a casa me calenté unos espaguetis en el microondas. Abro la nevera y cojo el bote de tomate, está vacío. Me sente por unos segundos, no sabía que hacer.
-Creo que ayer sobraron unos filetes rusos con tomate -dije en voz baja.
Solo quedaban dos junto con la salsa, les eché en el mismo plato que los espaguetis y les machaqué aplastandolos con el tenedor.Empecé a revolverlo todo, ya tenemos nuestros espaguetis a la boloñesa. El plato era bastante grande estoy llenísimo.
Se han acabado las clases, ya no tengo nada por lo que preocuparme. Se acabaron las clases, los examenes, los deberes, los madrugones... Tengo todo u verano por delante para hacer todo lo que se me ocurra. Y lo primero que voy a hacer es jugar un rato a la play y despues me ducharé, que huelo mucho a porro.
Despues de echar unas partidas enciendo el agua de la ducha para que se vaya calentando mientras que yo me preparo la ropa.

Me tumbo en la cama y cierro los ojos mientras me imagino a mi saliendo en la tele todo el mundo me admira, soy popular... Sería todo un sueño echo realidad. En fin, soñar es gratis.

-¡¡Lucia!! -grito sin darme cuenta

Me acabo de acordar, voy a ver si alguna de las chicas me ha mandado un mensaje. Espera un momemto, si no las di mi número... ¡¿Es que hoy nada me va a salir bien?!

Enciendo el móvil lo mas reciente que aparece en el recuadro de notificaciones son once llamadas perdidas de Lucía. Al instante pulso sobre la notificación eh introduzco el patrón de seguridad y al instante aparce su contacto. Sin dudarlo, dispongo a pulsar el boton para llamarla. Derrepente me salta una llamada, es ella de nuevo. Descuelgo el teléfono, ella estaba llorando...

-Luke -susurró debilmente -la carta -tras decir eso, comenzó a llorar con fuerza.
-¡¡Lucía!!¿Qué te ocurre? -piiii -la linea se había cortado.

Solté el movil, mi mente estaba en blanco.

-Agh, que dolor de cabeza -allí estaba yo, tumado en el suelo de mi habitación junto a mi cama.

¡¡Me acabo de acordar!! La carta. ¿Qué querria decir Lucía? La verdad es que no lo se, pero por si acaso miraré el buzón. Bajo las escaleras apresuradamente y rapido me pongo a buscar mi buzón entre los de todos los vecinos. El numero es el 24: planta dos, puerta 4.
Introduzco la llave y la giro, el buzón se abre y de el caen un monton de folletos, cartas, revistas y descuentos. Me pongo a rebuscar entre los papeles para ver si hay alguna carta extraña.
Se me acaban de caer todos los papeles al suelo por culpa de los putos nervios. Mis temblorosas manos empiezan a recoger todo lo que se me acaba de caer. Subo las escaleras de vuelta casa para poder observarlo todo con mas detenimineto. Entro en casa y me siento en una mesa del comedor, apoyando la publicidad y demas en la mesa. Rebusco entre todo lo que hay hasta encontrar un sobre rojo. No tiene ni remitente ni tampoco ningún tipo de destinatario o dirección. Creo que eso es a lo que se refería Lucía. La abro y en ella hay un folio doblado. Lo desdoblo con delicadeza y sobre todo miedo, mucho miedo.

"Hola maricón
Tenemos a tu novia y también a tus padres si quieres recuperarlos tienes que pagarnos 1 millón.
Tienes un plazo de dos semanas,
como no lo tengas dentro de dos semanas no los volverás a ver, date prisa cabrón"

N...No...Papa, mama...Lucía...
Corro hacia mi habitación y me pongo de cara al colchón tapando mi cabeza con la almohada. De mis ojos empiezan a chorrear lagrimas y de mi boca sale un potente grito de furia y dolor.
¿No se quien ha hecho esto, pero quien haya sido va a pagar por ello, y no precisamente con un millón de euros.
Ya me parecía que estaban tardando en volver de trabajar.
No me apetece cenar ni hablar con nadie, creo que lo mejor que puedo hacer es urme a dormir.

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⏰ Última actualización: Jan 09, 2016 ⏰

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