Loving You
Por:
Alejandro Gonzalez
Dedicado a:
Mi querido ponquecito
Like We Used To.
— ¿Estas bien, Thomas?
— ¿Eh? Oh, perdón lo siento. Me desconecte por un momento.
—No te preocupes.
No puedo evitar recordarlo, viendo mis pasos mientras ocurría, mientras veía lo que ella hacia sin hacer nada al respecto. Estaba petrificado, no podía moverme... Yo nunca la pensé capaz de...
—Entonces Thomas ¿Cómo te ha ido esta semana?
— ¿Qué?—Respondí, volviendo en mí mismo una vez más.
—... Thomas —Dijo mi terapeuta— No puedo ayudarte si tu no me ayudas. Sé que ha sido difícil pero estas aquí, y sé que eres lo suficientemente fuerte como para recuperarte.
—Claro, señorita Breuer—Conteste, mirándola a los ojos.
— ¿Podemos continuar entonces?—Siguió, tomando notas en su libreta.
—Pues me ha ido bien, he estado reuniéndome con amigos y creo que con eso he podido calmar mi ansiedad. También he vuelto a mis clases de boxeo, los doctores me lo han permitido y eso también ha ayudado.
—Me alegra ¿Has tomado los medicamentos que te recomendé?
—No, señorita Breuer. No lo hare, la idea de los antidepresivos no me gusta en lo absoluto.
— ¿Sabes que te haría las cosas más fáciles? ¿Verdad? —Contesto, insistentemente mientras intentaba ocultar su molestia hacia mi decisión.
—O también podrían hacer que finalmente pierda la PUTA CABEZA Y ME VUELE LOS CESOS CARAJO ¿¡ACASO NO HA CONSIDERADO LOS TRIMALDITOS EFECTOS SECUNDARIOS!? ¡SU PUTO TRABAJO ES AYUDARME Y POR LO QUE VEO QUIERE TOMAR ATAJOS! COÑO —Explote.
—Perfecto —Contesto ella sin siquiera parpadear.
— ¿Eh?—Estoy muy confundido.
—Escucha Thomas, claramente te has estado conteniendo y necesitaba encontrar una manera de que empezaras a desahogarte. Creo que con toda la cosa del boxeo te ira mejor pero aun así... Has pasado por mucho. Y te hará bien que te saques esa negatividad de ti.
—Oh—Esta mujer es más inteligente de lo que creí— Bueno, lo cierto es que me siento mejor... Gracias señorita Breuer.
—Oh por favor—Dijo ella mientras movía sus ojos a un lado y hacia una mueca con sus labios— Solo llámame Mónica, Thomas.
—De acuerdo, Señorit... Mónica—Casi me equivoco de nuevo.
—Ay, Thomas—Comento Mónica con una pequeña risa—. Te veré la próxima semana, cuídate y sigue con tus planes, has avanzado.
—Gracias, Mónica. Cuídate.
Mónica me acompaño hasta la salida de su consultorio, el cual estaba lleno de dibujos pegados en las paredes que evidentemente estaban hechos por pacientes menores, colocando su mano derecha en mi espalda. Una vez salí pude ver como mi padre me esperaba para llevarme a casa. Él se paró frente a Mónica, acariciando su cuello con una mirada que claramente preguntaba como estoy, y Mónica sin esfuerzos solo dijo en voz alta que no se preocupara. De esa manera el soltó una risita y pago la consulta sin más ni más.

YOU ARE READING
Loving You
RomanceEsta es una antología de historias de amor que solo buscan ser divertidas, dramaticas y sobre todo... MUY cursis, así que si eres un admirador de lo cursi, te gusta el romance o estas enamorado... Creo que este es tu lugar. P.D: Todo dedicado a mi q...