little angel // ls

Capítulo 1.

Harry

tres años atrás
marzo 1

Cuando un hijo de ángeles cumple 18 oficialmente es un ángel también. Yo, siendo hijo del angel de la muerte es casi seguro que lo sea también. Nadie elige que ángel ser, solo desea ser aquel o ese otro encargado del amor, o del cuidado de los niños pequeños, o cualquiera que no esté enfermo de la cabeza no quiere ser el de la muerte.

Pero para ser ángeles necesitamos renunciar a algo según nuestra misión, por ejemplo, los del amor no pueden ser amados, ellos solo viven del amor de otros o cosas malas pasan si dos angeles de la misma categoría se enamoran, hay leyendas sobre eso o cuentos vagos sobre lo que pasa, los suficientes para no querer probarlo; yo por ejemplo en caso de que sea un angel de la muerte tendría que renunciar al amor, a la mayor parte de sentimientos, al sueño, a mi hogar en donde vivimos los ángeles, a amigos y a descansos y mil cosas más que a mi padre y al consejo se les ocurrió agregar. Solo rezaba por no ser ese ángel.

Para saber que ángel serás tienes que ir con Jhon, es un ángel de los más poderosos y mi tío, él era quien tenía en sus manos la decisión de que ángel sería yo y él sabía que no estaría de acuerdo en ser como mi padre, yo no quería ser el encargado del fin de las vidas de personas unas sanas y otras casi muriendo por si solas.

Entre al cuarto donde hacía ese pequeño ritual y te nombraba el ángel que serías.

— Nervioso Harry? – pregunto Jhon que se encontraba sentado en el suelo con un montón de velas alrededor.

— Tío Jhon... yo... – suspiro – no quiero ser ese ángel. – Jhon lo miraba con una pequeña sonrisa de angustia.

— Harry, yo sé que piensas que esto está en mis manos pero no es tan fácil.

— Eso quiere decir que quizá me puedas ayudar?

— Absolutamente no — Harry se notaba frustrado – Dios manda el don según lo que sabe de ti, dentro de unos años eso podría cambiar.

— Papá se quedo con ese don las dos veces de la elección – estaba completamente desanimado porque normalmente si tu padre fue así tú eres así, Gemma fue más fácil, fue como mamá. Así funciona esto padre-hijo y madre-hija, raramente se combinan.

— Lo sabremos en cuatro años Harry...

Pasó el ritual y la sorpresa? No hay sorpresa, soy un ángel de la muerte.

Llegue a casa y me topé con Dan, un ángel ya algo viejo que trabajaba para nosotros en casa.

— Joven Harry que bueno que ha llegado, su padre lo espera en el salón. Venga. – empecé a seguir a Dan y solo rezaba porque su padre no haya exagerado la celebración pero no sirvió de nada. Entramos al salón y había muchos angeles por doquier, en mesas y viéndome directamente.  Solo seguí el camino con Dan hasta llegar a la mesa donde estaba mi padre.

— ¡Hijo! has llegado al fin, todos estábamos muy impacientes por tu llegada, así que... – abrazándome – ¿cuál es el don?

— Muerte. – dije tratando de sonreír, sabía que no podía tratar mal a su padre frente a muchos alrededor.

— Bien, escuchen todos. – Mi padre hablaba hacia todos – Harry es un ángel de la muerte tal y como su padre. – Él solo sonreía y no paraba, tomó su copa. – Brindemos por el don de Harry y su cumpleaños también. – y todos brindaron.

Apenas tuve la oportunidad de salir del salón escape  y fui al jardín trasero sentándome en el césped.

— No es tan malo ser un ángel de la muerte Harry... – escuché la voz de Genma sentándose a un lado de mi.

— Tu que sabes – deje frío y sin mirarla.

— Jack lo es y no es tan malo.

— Jack no es débil como yo.

— No eres débil solo tienes sentimientos y no es malo tener sentimientos. – Gemma recostó su cabeza en mi hombro.

— Me los quitaran, lo sabías? – se alejó de ella – las reglas han cambiado...

— El tio Jhon te ayudará con eso si quieres, sabes que haría todo por ti.

— Si lo haría todo, por qué soy un ángel de la muerte? – miro abajo – no quiero ser el encargado del último latido de una persona...

— Harry no es nada malo, ellos irán a un mejor lugar...

— Hay personas que sufren cuando las otras se van, o te olvidas de mamá? – habría deseado no haber dicho lo último pero ya era tarde.

— Harry es por mamá t-todo esto?

— No quiero que los demás sufran lo que yo sufrí cuando mamá se fue... – suspiró – cuando yo me encargue de que alguien muera... e-ellos tienen familia, su familia sufrirá lo que yo sufrí y nadie debe sentir eso, nadie Gem.

— Harry mamá querría que hicieras esto... – solo suspiré.

— Mañana es el primer día y quisiera que estuviera aquí, deseándome suerte y que pronto nos veremos.

— Estoy segura que lo habría hecho...

al otro día después de la celebración.
marzo 2

Desperté y había una nota en el buró.
"feliz primer día pequeño ángel" y una ciudad. Londres. Me tocaba ser un ángel de la muerte en Londres. Seguí revisando la tarjeta y había una pequeña nota "tendrás sentimientos, fue lo único que pude hacer por ti, aún así no le digas a tu padre y buena suerte en tu primer día. atte. Jhon" Sonreí.