Duele echar de menos a la persona que más has querido, pero sin embargo, la que más te dañó.
Duele saber que para esa persona no eres nada, ni nadie.Pues bien, a veces me da por echarte de menos, porque sí, sigues doliendo, creo que serás un dolor que seguirá ahí siempre, aún que espero que baje la intensidad.
Oye, que sigo precisando de tus abrazos para sentirme viva, será ese el por qué del sentirme tan muerta.
Te confesare algo, una vez soñé que me hablabas, que volvíamos a ser la uña y carne. Que estabas.
Al despertarme sentí un gran vacío, como eses que parecen comerte las entrañas a medida que te das cuenta de la verdad.De que no estabas.
A veces siento que nunca signifique mucho para ti, la desgracia fue que me di cuenta demasiado tarde. Cuándo ya formabas parte de mi forma de ser, de vivir, de sentir.
Quizá algún día te des cuenta de lo que hiciste, mientras tanto seguiré aquí jodida, a ver si yo misma consigo desgarrarme ese vacío para que no vuelva, pero sigo con mis intentos fallidos. Pero cuándo lo logre, creeme que me pasearé a tu lado sonriente, demostrando que, tarde o temprano seré capaz de olvidarte.
(Mañana seguramente lo retoque un poco)
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¿reflexiones? No lo sé.
Teen FictionQuizá es que necesite hablar,o escribir,en este caso. No se que es esto ni para que lo hago,ni creo que me lean. Solo busco decir lo que siento.