El Diario De Alice Liddell (Alice: Madness Returns)

El País De Las Maravillas

Capitulo 3
Valle De Lágrimas

Este mundo... Fue un viajecito muy desquiciante. Pero me librare de Oxford o... De lo que sea ahora. En este mundo en bastante hermoso, donde a caído me parece bastante familiar, un valle hermoso y lleno de a criaturas extrañas, ''Ya iba haciendo hora, Alice.'' escuche una voz y de inmediato mire a... El gato sonriente, me acerque a el y me cruce de brazos bastante enojada, estaba en mi, lo que fue mi alguna vez mi país de las maravillas.

-¡Maldito gato! No intentes mangonearme... Estoy muy atacada.

*Perrrrrrfecto. Cuando no lo estas no nos sirves de mucho.

-No me ayudas....

*Pero sabes que puedo hacerlo.

-Me basto yo misma, gracias, para asustarme sola.

*Ten cuidado Alice, una nueva ley rige el País de las Maravillas, aquí se lleva la justicia severa, en guardia, preparate.

Después de esto desapareció y yo comencé a caminar, si no mal recuerdo es el Valle de Lágrimas, vi un pequeño vidrio encima de un hongo, apenas lo toque y oí la voz de mi hermana, ''Tienes algo de rana Alice. Saltas tan bien.'' en un desnivel tuve que saltar a un pieza de dominó, es cierto, siempre e sido ''parte rana'' por mi habilidad de saltar grandes distancias como los anfibios, al llegar a un río, ¿morado? Apareció de nuevo ese gato... Me sumergi en aquel liquido y me encogí viendo cosas que siendo de mi tamaño no podía ver totalmente, avance un poco más y.. Ese río tan cristalino se convirtió en un río de sangre, más allá encontré de nuevo al gato obteniendo un arma, ''La espalda vorpal'' resivia como nombre, a mi parecer era solo un cuchillo de cocina pero al hacer cortes a la nada se oía como si estuviese cortando algo. El gato desapareció y oí unas burbujas estallar, mire a un monstruo de ¿aceite? Y piezas automotrices bastante oxidadas junto con una cara horrible, me acerque a aquí el monstruo y lo ataque aunque me hizo algo de daño.

Termine con la duquesa, me entrego un molinillo de pimienta que serbia muy bien como un arma blanca, todo por un morrito de cerdo. Al terminar me fui para encontrar mi hermoso mundo echo pedazos, tome un ''tren vía'' y apareció el gato de nueva cuenta, ''Ve con el sombrerero.'' fue lo único que dijo dejando me chocar contra la pared de donde se hayaba el sombrerero. Debo agradecer que no tengo nada roto...